Bellido, en su primer año de mandato: «No habrá cambios en el gobierno municipal de Córdoba»

¿Ha notado la inexperiencia institucional de Ciudadanos?

No es un tema de partidos. Llegar supone un choque . Mi experiencia municipal sirve para asumir la Alcaldía, que no te sorprendan cosas, conocer a los funcionarios por su nombre y apellidos. Ejemplos de ese choque se dan en todos los mandatos, en todos los partidos. Quien viene a aportar a la política sin conocer los resortes de la Administración tiene un periodo de adaptación. Pasó, pasa y pasará. No es exclusiva de Cs ni de nadie. Este periodo de tensión me ha dado sorpresas agradables, bastantes, de personas que han crecido muchísimo.

Dé nombres.

Bernardo Jordano ha hecho un papel fantástico en Recursos Humanos desde el primer día con la adquisición de materiales, con las medidas de protección, con decisión y valentía. Eva Contador y Eva Timoteo se han echado a las espaldas la carga social. Otros lo han hecho muy bien pero venían curtidos. Ellos han respondido con apenas ocho meses de experiencia.

Tras el primer año en el cargo, ¿«ayusea» o «feijoóa»?

(Risas). Eso lo tienen que decir los demás pero creo que es bastante evidente .

Parece que el PP tiene ahora dos almas. La de Álvarez de Toledo -más tremenda- y la de Núñez Feijóo -más institucional-.

Creo que el PP ha crecido siempre sumando. Si un partido quiere ser de gobierno, tiene que contar con perfiles distintos y no una homogeneidad en ideología, pensamiento o formas de expresión. De lo contrario, seríamos muy minoritarios. Aznar sumó al Partido Demócrata Popular, a Alianza Popular, a los liberales. Incluso a algunos socialdemócratas.

Y gobernó gracias al PNV y a CiU.

Exacto. Ese es el PP donde yo me he criado políticamente y creo que sigue existiendo hoy en día. La coordinación es absoluta. Durante los últimos tiempos, he hablado en muchas ocasiones con Antonio González Terol -el secretario de política municipal-, con el secretario general del partido, con Juanma Moreno. Pero todos tenemos nuestros modelos de gestión. El mío es Paco de la Torre, un pedazo alcalde de Málaga que ha transformado su ciudad y al que me gustaría parecerme un poquito.

¿Y no ve el panorama interno y se le escapa un «buf»?

A ver, no siempre estoy de acuerdo con mis compañeros de partido pero este es un partido muy grande. Es evidente que veo a compañeros diciendo cosas que en forma y fondo no me gustan. Pero para eso están los órganos internos. Participé en la última junta directiva nacional con Pablo Casado y suscribo su mensaje. Al cien por cien. A ver, he participado en una convención de alcaldes y en la junta directiva, y el eje central de lo que dijo mi presidente es lo que yo defendía en la oposición y estoy intentando poner en práctica. Vamos a centrarnos en lo importante, vamos a dejarnos de polémicas que no llevan a nada. Sí le digo: el PP es un partido plenamente presidencialista. Quien marca los tiempos es el presidente nacional. Pero me siento cómodo en el discurso de ser un partido útil. Sobre la identificación con el PP andaluz, ni le cuento. Es absoluta .