Un acto de devoción en el Colodro

La hermandad de la Merced fue la primera en Córdoba en tener el título de «Sacramental». Es por ello que la cofradía valoró la opción de realizar un gesto acorde al mismo durante el cortejo. Un acto de respeto y devoción ante el Santísimo. El año 1986 fue el primero en el que la hermandad pidió a las religiosas del Colodro que abrieran las puertas del convento al paso del cortejo.

Hasta ese momento, la procesión de la Merced pasaba por el convento y éste permanecía cerrado. El primer día que abrieron las puertas al paso de las imágenes de la hermandad, el párroco del se atavió con un megáfono y comenzó a explicar a los presentes el por qué de ese gesto mutuo cuya única finalidad es mostrar respeto y fe ante el Altísimo.

Tal fue el fervor que este gesto comenzó a levantar entre los cofrades que incluso en los años en los que el cortejo realizaba estación de penitencia en la Santa Iglesia Catedral continuaban realizando este acto ante el Colodro. Lo llevaban a cabo ya de recogida, casi amaneciendo, durante unos años en los que procesionó en la madrugada del Viernes Santo de la Semana Santa de Córdoba