PASAR EL RATO

Volcánicos bramidos

Si Moreno Bonilla logra sobreponerse a la vocinglería de su adversaria, ya nada podrá con él

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04/03/2025 a las 07:30h.

Se acabaron los alegres días. El PP andaluz está perdido, y haría bien en ir pensando en disolverse y escribir sus memorias. No es que lo haya hecho mal, que gobierna con holgura y amplitud de criterio. Quizá su presidente tiene demasiada amplitud ... de criterio, que se parece tanto a la falta de criterio. Pero el destino se le ha vuelto hostil y estrepitoso. La inteligencia, decía el gran Zubiri, es el conocimiento de la realidad. Y si lo dijeron más autores, considérense incluidos en la cita. A uno, qué más le da. Íbamos diciendo que la realidad se ha vuelto hostil al PP andaluz. La realidad política andaluza padece hoy el rugido sin escolarizar de la licenciada Montero, acaso la mujer menos evolucionada de la historia política de España.

De la de Europa, quizá. Vulgar como un eructo. Montero en jarras y cierra Andalucía. Montero en jarras pudo haber sido una desenfadada y eficaz lavandera del río Guadalquivir, pero decidió estudiar medicina. Y líbrenos Dios de enfermar a su vera. Andalucía alumbró, primero, a los hermanos Machado; a Pablo Picasso, después, y por fin, tras sucesivas degeneraciones celulares, a María Jesús Montero, médica, ministra y candidata forzada a la presidencia de la Junta. Sólo la medicina ha podido librarse de ella. Por eso tiene tanto nivel la medicina andaluza. Su promoción al gobierno de esta tierra es un desafío a los nervios del contribuyente, como todo lo que programa Sánchez, el doctor indocto, y el peligro viene más del sonido que del sentido. Soportar durante un año y medio el vocabulario, la sintaxis, y muy especialmente, el vocejón de la licenciada Montero es mucho más de lo que el peor de los andaluces merece soportar. Volcánicos bramidos, así llamó Miguel Hernández a la algarabía de la fiera en la plaza. Sin referirnos al pensamiento, por el que su cabeza no parece haber sido contaminada ni siquiera en la universidad. Afortunadamente para ella, en el actual Consejo de Ministros se disimula muy bien esa carencia. Si Moreno Bonilla logra sobreponerse a la vocinglería de su adversaria, ya nada podrá con él.

Más suerte tiene el PP cordobés. Porque se enfrenta a una pensadora, y eso encierra menos peligro. Mientras ella reflexiona, el PP puede seguir ganando elecciones. La nueva secretaria general del PSOE de Córdoba es doña Rafaela Crespín, que repite, y hace pocos días sorprendió al Patrimonio de la Humanidad con este desahogo: «Reflexiono todos los días cómo mejorar los resultados del PSOE en Córdoba». Teniendo en cuenta que el PP ocupa la alcaldía desde hace casi seis años, esa mujer lleva casi seis años obsesionada por el mismo pensamiento diario. Podría objetarse que también tiene a su disposición meditativa la flor de la jara, el cante flamenco, la puesta de sol en Trassierra…Al menos, la socialista cordobesa piensa y no embiste.