Cinco claves para que el Córdoba salga de la crisis

Una de las premisas fundamentales para que el Córdoba pueda reaccionar de la forma más inmediata posibles es que el cuerpo técnico, liderado por Merino , encuentre un modelo de juego y un once tipo al que pueda otorgarle confianza con cierta regularidad. El técnico, en cualquier caso, ha reducido las variantes tácticas respecto a la etapa de Carrión. Ha usado el 4-4-2 y el 3-5-2. Posiblemente, a partir de esta semana se decante, finalmente, por el clásico 4-4-2. A partir de ahí, necesita también hallar un once más o menos tipo que tenga confianza y regularidad. Lo hizo en los dos primeros partidos a sus órdenes, pero la falta de resultados le han obligado a retocarlo. Con la vuelta de Jovanovic y Caro, Merino podría usar esta semana su alineación favorita.

Es casi de obligado cumplimiento que encuentre un punto de inflexión en la dinámica. En tiempos difíciles, todo tiende a salir mal. Por eso, es básico que encuentre una chispa en el campo, en forma de victoria, para intentar que, a partir de ella, cambie el rumbo del equipo. Recibe a la Cultural, un equipo que lleva 11 partidos oficiales sin ganar. Tres puntos pueden cambiar la situación mental y hasta puede facilitar el rendimiento físico .

La solución, sin embargo, parece poco probable que pueda encontrarse solo en el banquillo y los jugadores. Posiblemente, los dirigentes se vean obligados a realizar un esfuerzo económico para variar la tendencia hacia Segunda B que ahora mismo ha trazado el equipo. El club tiene que encontrar la fórmula para aumentar el límite salarial que ya agotó en verano para confeccionar la plantilla. Una vía, siempre abierta pero inexplorada por el máximo accionista desde su llegada, es la ampliación de capital . Además, la entidad también podría mejorarlo con el cobro de una cantidad aplazada del traspaso de Florin Andone. El dinero, esta vez, es necesario, aunque, por sí solo, insuficiente.

Lógicamente, el equipo tiene que llegar vivo al mercado de invierno con los recursos económicos, de plantilla y técnicos que tiene ahora mismo. Entonces, el club tendrá que plantearse una reconstrucción seria del plantel cordobesista. Hasta ahora, el Córdoba de González no ha pasado de los cinco refuerzos en enero desde que llegó en 2011. Posiblemente, sea necesario algo más. Lo dicen algunos de los técnicos a los que ha consultado el propio club. Habrían recomendado entre seis bajas y ocho altas.

Evidentemente, los protagonistas son los dirigentes, los técnicos y los jugadores. Solo ellos pueden aportar lo imprescindible para cambiar el rumbo de la situación. Pero, todo será más fácil si la afición aparca la división interna, su fractura con los dirigentes blanquiverdes y da su apoyo incondicional a la plantilla. El futbolista, evidentemente, tiene más opciones de dar mejor rendimiento si siente el calor de sus seguidores que si la situación se torna en bronca, pitos y críticas durante los partidos. Sin embargo, el aliento de la afición no hace billetes para invertir, ni pone alineaciones ni marca goles. Su apoyo es importante, pero no es el factor fundamental.