Sánchez sorprendió al PNV al entregar el cuartel de Loyola sin pedir nada a cambio

La realidad es que apenas horas antes de que Aitor Esteban confirmara el «sí» de su grupo al Presupuesto, las delegaciones de PNV y del Gobierno seguían sin ponerse de acuerdo sobre el futuro de estas históricas instalaciones militares, construidas en 1926, y que se habían convertido en uno de los aspectos nucleares de la negociación, tal y como reconocen a ABC fuentes conocedoras de la negociación.

El intercambio de propuestas en uno y otro sentido «se alargó durante la noche del lunes», y no se detuvo hasta que el Ejecutivo central cedió a la exigencia de desplazar al Regimiento de Infantería «Tercio Viejo de Sicilia» 67 del citado acuartelamiento donostiarra.

Finalmente, «el pacto resultó ser incluso más fructífero» de lo que los propios nacionalistas esperaban, dado que viene sin contrapartidas: «La ubicación del cuartel deja de ser asunto nuestro», celebraron ayer en el aniversario de la muerte de Sabino Arana.

El Gobierno de coalición PSOE-Podemos aceptó flexibilizar una postura que parecía inamovible hasta apenas unas jornadas atrás, como es la de mantener al Ejército en el cuartel de Loyola, catalogado de «vital importancia» por el propio Ministerio de Defensa . Así lo defendió la «número 2» del Ministerio, la secretaria de Estado Esperanza Casteleiro, en el Senado el pasado 10 de noviembre.

Pero algo cambió a lo largo del pasado fin de semana, en el que según apuntaron desde la formación nacionalista se produjo una negociación «intensa»: «A uña de caballo», apuntan las mismas fuentes.

Hacía años que el Ayuntamiento de San Sebastián trataba de hacerse con la propiedad de los terrenos sobre los que se erige actualmente el cuartel, ubicado en el margen del río Urumea. Su propósito no es otro que el de levantar en la zona cerca de dos millares de viviendas, gran parte de ellas de Protección Oficial . Para ello, además de la transacción económica, trataban de ablandar la postura del Ministerio de Defensa ofreciéndoles alternativas para una nueva ubicación del «Tercio Viejo de Sicilia».

En este sentido, desde el PNV se apuntaba ayer a este periódico que en su día se propusieron enclaves como la Loma de Antondegi, los terrenos de la Hípica en Loyola, el polígono industrial de Euskusaitzeta o la zona de Belartza. No obstante, finalmente no tendrán que preocuparse por este asunto, dado que el acuerdo viene sin contrapartidas. «La futura ubicación de las instalaciones militares será cosa del Ministerio, que decidirá si las ubica en San Sebastián o en otro término municipal del territorio histórico», sentencian dirigentes del grupo vasco.

Fuentes oficiales del Ministerio de Defensa, consultadas por ABC, subrayan que «el Ejército se va a quedar en San Sebastián sí o sí. La permanencia del Ejército está garantizada en Donostia. Eso no es negociable» . En este sentido, se comparte con el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, que se busque que «el Ejército desaparezca» de San Sebastián. «Vamos a sustituir unas instalaciones del siglo XIX por otras del siglo XXI, como se merece el Ejército de Tierra. Creo que el compromiso de este Ministerio de Defensa con las Fuerzas Armadas es más que evidente», subrayaron las mismas fuentes del Ministerio a ABC.

El pacto del Ejecutivo PSOE-Podemos con el PNV sobre el acuartelamiento de Loyola ha cogido por sorpresa al propio Ejército. Hace tan solo una semana, una nota oficial ante una noticia aparecida en El Diario Vasco sobre la enmienda del PNV fue comentado en los siguientes términos: «Es una noticia muy recurrida desde hace muchos años, en donde siempre se ha trasladado la idea de que se estaba muy cerca de una resolución definitiva que nunca se ha materializado, y en esta ocasión el relato no se presenta muy diferente a todas las anteriores ocasiones, por lo cual el grado de preocupación es inexistente».

De estas líneas se infiere que el Ejército de Tierra en ningún momento fue consultado sobre esta negociación con el PNV por parte del Ejecutivo de Pedro Sánchez.