Sánchez, de perfil ante la candidatura de Ucrania a la UE

«No es un asunto que pueda tratarse con ligereza», cargó ayer la portavoz morada de Exteriores, Lucía Muñoz , en el Congreso. «Hay que ajustarse al derecho internacional y hay que plantearse si Ucrania ahora mismo es plenamente capaz de ejercer su soberanía . Si realmente reúne las condiciones necesarias para emprender el proceso de adhesión a la UE», añadió ante la Comisión de Exteriores.

Además, la parlamentaria morada continuó defendiendo que la candidatura de Kiev a la UE debe estar sometida a la aceptación de la Federación Rusa . «No puede desligarse de las conversaciones de paz» ni abordarse como «un elemento separado sin medir las consecuencias que pueden agravar aún más el conflicto», añadió.

Moncloa, por tanto, parece lejos de impulsar la candidatura ucraniana en el seno comunitario como ha pedido Kiev a cada uno de los estados miembros y como apoya la inmensa mayoría de los españoles. No en vano, en el estudio del CIS publicado en marzo el 84,7 por ciento de los encuestados se mostraba a favor de que se conceda a Ucrania la oportunidad de entrar en la Unión. El Gobierno tampoco desvela si Sánchez mantendrá una posición proactiva hacia la petición ucraniana en el Consejo Europeo de finales de junio, en el que se abordará la decisión. Hoy por hoy, la postura del Ejecutivo español se resume en que votará a favor de lo que decida la mayoría de sus socios.

Ante la tibieza del Gobierno el Congreso expresó ayer su apoyo a la candidatura de Ucrania e instó al Ejecutivo a «expresar públicamente su apoyo» a la misma «de cara al Consejo Europeo de junio». La iniciativa fue impulsada por Ciudadanos dentro de la Comisión de Exteriores y salió adelante después de una negociación en la que el PSOE exigió enmendar el texto añadiendo la muletilla de que el Gobierno también debe mantenerse «a la espera del dictamen de la Comisión Europea».

Este no fue el único cambio que los socialistas reclamaron. Originalmente, el texto de Ciudadanos también pretendía instar al Gobierno a « redoblar el envío de armamento pesado desde España a las tropas ucranianas, de forma complementaria» a la Unión Europea. Pero para no provocar el rechazo de Unidas Podemos, los socialistas pidieron quitar «armamento pesado» de la frase. «Continuar respondiendo de un modo decidido y fuerte, dentro de la coordinación con los aliados de la OTAN y nuestros socios de la Unión Europea, a cualquier demanda de envío de todo tipo de material que las tropas ucranianas necesiten para la defensa del país y de sus ciudadanos », fue el llamamiento que salió finalmente aprobado.

Fuentes de Ciudadanos restaban ayer importancia a estos cambios subrayando que fue «una negociación y, por lo tanto, no hay exigencias». «Se negocia para llegar a acuerdos que beneficien a los ciudadanos », apuntaron, destacando que la expresión «todo tipo de material, incluye el armamento pesado».

El debate sobre el apoyo a la adhesión de Ucrania sirvió para aflorar esa posición pasiva del Gobierno , con la portavoz socialista, Gemma Araujo , evitando unir la posición general de apoyo a Kiev con la decisión del próximo Consejo Europeo. «Apoyamos que Ucrania forme parte de la Unión Europea. La respuesta es evidentemente clara y contundente», subrayó, «pero hay que dejar constancia de la reunion informal celebrada en Versalles donde los jefes de Estado de la UE analizaron cómo lograr estar a la altura responsabilidad», matizó.

Y mientras los socialistas intentaron no ir más allá de las buenas palabras, el otro miembro del Gobierno, Unidas Podemos, dejó al descubierto que también la candidatura de Ucrania abre brecha en la coalición al abstenerse en la votación mientras los socialistas votaron a favor tras los cambios arrancados a Ciudadanos. Otro punto polémico que se debatió ayer fue la declaración de persona «non grata» a Vladímir Putin . Vox defendió una propuesta en este sentido pero PSOE y Unidas Podemos rechazaron el texto alegando que era «insuficiente» y que el partido de Santiago Abascal solo pretendía sacudirse la imagen de afinidad al dictador ruso.a propuesta de sanciones.

Pero para que esta maniobra no pudiera interpretarse como un apoyo al dictador ruso, los socialistas exigieron a Ciudadanos incluir un punto adicional en la iniciativa de apoyo político a Ucrania para declarar persona «non grata» a Vladímir Putin , quedándose así aprobado por el Congreso. El PP, por su parte, defendió un aumento de las sanciones a la Federación Rusa y su expulsión de la OSCE, lo que fue rechazado por los socialistas.