Un retraso de la justicia gala propicia que la etarra entregada hace dos días quede libre
La Policía localizó ayer un nuevo «zulo» de ETA -el número trece en una semana-, en un paraje próximo a la ciudad de Massaguel, en el departamento de Tarn.
En su interior, la banda escondía 7 revólveres, una pistola Beretta, 6.860 cartuchos, 11 zikiak ( ... utensilios usados para robar coches), 15,4 kilos de polvo de aluminio, 3,15 kilos de pentrita y 76 metros de cable detonante.
El hallazgo coincide con la reunión que mantuvieron en París el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y su homólogo francés, Brice Hortefeux, que anunciaron precisamente el descubrimiento de nuevos «zulos».
Coincidiendo con la comparecencia de los ministros de Interior español y francés, Alfredo Alfredo Pérez Rubalcaba y Brice Hortefeux, respectivamente, en la capital gala -donde ambos reiteraron la «determinación» de ambos países en la lucha contra ETA-, la Audiencia Nacional se veía obligada ayer a dictar prisión eludible con fianza contra la etarra Maite Aranalde. El motivo: la falta de respuesta de Francia a una de las órdenes de detención europea cuya cumplimentación habría posibilitado el ingreso en prisión incondicional de la terrorista.
De esta forma, y tan pronto como afronte el pago de los 12.000 euros que el juez Eloy Velasco le ha impuesto -algo que el Movimiento pro Amnistía anunció que Aranalde hará hoy por la mañana-, la etarra podrá pasearse a sus anchas por territorio español. Eso, en el mejor de los casos, porque ante la posibilidad de que la etarra se dé a la fuga, la Fiscalía de la Audiencia Nacional pidió ayer al magistrado que devolviera a Aranalde a Francia hasta que ese país cumplimente la euroorden que la reclama por varios delitos de estragos (explosiones en varias gasolineras de Madrid en el Puente de la Constitución de 2004). Velasco no accedió a esta petición. Desde el Movimiento pro Amnistía se aseguró que Aranalde acudirá esta tarde a un homenaje en Ibarra (Guipúzcoa).
De esta forma, la única causa que se vio ayer en la Audiencia Nacional contra la etarra fue la relativa a un delito de tenencia de explosivos que por sí mismo no justificaría una prisión incondicional. Ello, sumado a que su compañero de comando fue anteriormente absuelto por este mismo delito, apuntalan, según fuentes jurídicas, la decisión tomada ayer por el juez.
Mientras en la Audiencia Nacional trascendía este error, Rubalcaba y Hortefeux alertaban de que ETA «sigue viva y amenazante», en España y en Francia, y prometían «terminar con ella» «al norte o al sur, se encuentre donde se encuentre».
Tras una comida de trabajo, la primera con un colega europeo desde el último cambio de gobierno francés, Hortefeux insistió en la importancia excepcional de la cooperación antiterrorista con España, haciendo un balance muy positivo de las últimas redadas y descubrimientos de zulos: «En lo que va de año, la Policía francesa ha detenido a 25 miembros de ETA. Recientemente hemos descubierto más de 900 kilos de explosivos, 15 bombas lapa, 342 detonadores, 23 armas de fuego, y unas 4.700 municiones de distintos calibres».
«ETA sigue viva»
Por su parte, Rubalcaba agradeció a su colega francés la colaboración policial, «capital, para luchar contra ETA», evitando calculadamente cualquier optimismo excesivo: «No debemos olvidar que ETA sigue viva y deseando matar. Nuestro trabajo consiste impedirlo. Debo recordar a los etarras y a los aspirantes a etarras que España y Francia los perseguirán, estén donde estén, al norte o al sur, hasta cazarlos, detenerlos, juzgarlos y condenarlos», dijo.
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