Interior coordinará la información entre los mandos policiales tras las críticas a los Mossos d'Esquadra

Según fuentes jurídicas consultadas por ABC, al encuentro -que duró en torno a 50 minutos y se celebró en la sede de la Audiencia Nacional-, asistieron el comisario general de Información de la Policía Nacional, Enrique Barón ; el responsable de Información de la Guardia Civil, Pablo Salas ; y el comisario de Información de los Mossos d’Esquadra, Manel Castellvel , además de dos representantes del Ministerio del Interior. También acudieron el presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro ; el fiscal jefe del tribunal, Jesús Alonso ; el teniente fiscal, Miguel Ángel Carballo ; y la fiscal del caso, Ana Noé .

Las mismas fuentes explicaron que fue «una reunión de trabajo» para coordinar la participación de cada cuerpo en la investigación. Su celebración tuvo lugar después de que Fernando Andreu acordara dejar en libertad provisional al último de los detenidos por los atentados terroristas, Salh El Karib , que regentaba el locutorio donde se compraron los billetes de avión de Driss Oukabir y el imán salafista, Abdelbaki Es Satty .

«El primer tramo de la investigación ha sido la identificación y posterior puesta a disposición judicial de los autores, ahora vamos a investigar qué otros elementos pueden concurrir en esa célula», informaron. También aclararon que «Andreu no ha dado ni quitado competencias a ninguno de los cuerpos policiales porque las competencias vienen impuestas por la ley», señalaron, rectificando así las informaciones publicadas en ese sentido por algunos medios de comunicación.

Asimismo, explicaron que el encuentro transcurrió en un «ambiente de cooperación» en el que se decidió que será el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (Citco) -órgano de inteligencia creado en 2014 para gestionar toda la información estratégica relativa al terrorismo, la criminalidad organizada y las organizaciones violentas-, dependiente del Ministerio del Interior, el que «centralizará la información» de cada policía -debiendo cada cuerpo designar un enlace de comunicación-, y que posteriormente «compartirá» con el resto los resultados de las diligencias de investigación. Una medida que se adoptó después de que el martes la Asociación Unificada de los Guardias Civiles (AUGC) y el Sindicato Unificado de Policía (SUP) responsabilizaran en un comunicado a los Mossos d’Esquadra por la «exclusión dolosa» y el «aislamiento» sufrido por ambos cuerpos durante la investigación y gestión de los atentados yihadistas.

Además, esas fuentes jurídicas señalaron que, como establece la ley, será la policía autonómica la que se ocupará de los flecos de la investigacíon abierta en Cataluña, mientras que la Policía y la Guardia Civil se ocuparán de las diligencias a realizar en el resto del territorio nacional y a nivel internacional. En este último caso, apuntaron a las comisiones rogatorias que se practicarán con las autoridades de países como Bélgica, donde viajó el imán de Ripoll entre enero y marzo de 2016; Francia, a cuya capital realizaron los terroristas una incursión relámpago el 11 y 12 de agosto de este año; o Marruecos, donde han sido detenidas tres personas por su presunta vinculación con la célula terrorista.

Esclarecidas las competencias de cada cuerpo, el instructor de la causa, Fernando Andreu, emplazó a los altos mandos a trabajar con todas las garantías judiciales que exige la investigación, «pero también con rapidez».

Una llamada de aviso que se produjo después de que este diario informara de que la magistrada titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Amposta, Sonia Nuez Rivera , quien investigó en un inicio la explosión producida en el chalé de Alcanar , alertase a los Mossos d’Esquadra de que muy probablemente allí se estaba gestando un atentado terrorista. «Señoría, no exagere», fue la respuesta de la Policía autonómica, y ello un día antes del atropello masivo de las Ramblas.

Las asperezas entre los cuerpos por determinadas negligencias de la Policía catalana en la gestión de los atentados presentan ya relieve internacional. Ayer se conoció que la Policía del municipio belga de Vilvoorde trasladó a los Mossos d’Esquadra en 2016 sus dudas sobre la posible radicalización de Abdelbaki Es Satty, el imán de Ripoll. Pese a ello, la Policía autonómica no comunicó ni a la Policía Nacional ni a la Guardia Civil la información. A ello se unen las pretensiones de Puigdemont de que los Mossos tengan presencia en la Europol , un organismo que solo trabaja con las autoridades de los Estados miembros.