El guerrismo irrumpe en el debate del PSOE y pide un gobierno de concentración con el PP
Igual que resulta difícil advertir una bolsa de gas hasta que una chispa provoca la explosión, los estados de opinión sólo afloran en un partido cuando alguien de peso se hace eco... y estalla el debate. Eso está pasando en el PSOE después de que ... a José María Barreda se le ocurriera el martes pedir una remodelación «importante» del Gobierno en julio, tras la Presidencia Europea. Curiosa es la reacción de otros barones que, en privado, dicen lo mismo e incluso dan nombres de ministros/as candidatos a ser sustituidos, y en público se limitan a defender la «competencia» exclusiva de Zapatero para hacer cambios. Así no favorecen la estrategia del PP, «que va a por él, a minar su credibilidad», dicen fuentes consultadas por ABC, y tampoco defienden un gabinete que ofrece síntomas alarmantes de final de ciclo.
Pero, a la sugerencia del manchego, se sumó ayer otra inesperada: José Félix Tezanos, editor de la revista «Temas» cuyo Consejo de Redacción preside Alfonso Guerra, va más allá y defiende un gobierno de concentración con el PP que dé «credibilidad». «Sería oportuno y positivo para la economía española -declaró Tezanos a Servimedia- un gran gobierno de coalición que diera credibilidad y estabilidad y permitiera hacer las cosas que son necesarias a tres años vista», transmitiendo «mensajes de seguridad y que sean creíbles» a los ciudadanos, no como ocurre en este momento.
Inicialmente, la Dirección Federal había restado importancia a lo dicho por Barreda pero ayer vio que no acaba la polémica y optó por pasar a la ofensiva. Fuentes de la dirección socialista, en declaraciones a Efe, le recriminaron no haber aprovechado su presencia en la reunión del Comité Federal del PSOE del sábado para manifestar su criterio y utilizar una entrevista en Punto Radio para revelar su opinión. Otras fuentes relacionan su postura con la necesidad de desmarcarse del Ejecutivo porque las encuestas del PP dan una clara victoria de María Dolores de Cospedal en las autonómicas de 2011.
La Dirección socialista hizo un llamamiento a centrarse en «lo trascendente» , que es solucionar la crisis. En ello coincidieron los «barones» de los dos territorios más importantes para el socialismo en términos electorales: el catalán José Montilla replicó con contundencia a Barreda que «no me gustaría que nadie me dijera cuando tengo que cambiar el Gobierno». El andaluz, José Antonio Griñán, prefirió tomárselo con humor y pidió «por favor», no más cambios, que bastantes problemas ha vivido por suceder a Chaves en el PSA. Es mejor «dejar las cosas como están».
Pese a todo, Barreda insistió ayer: «El Gobierno de España y el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, contará, siempre, con mi lealtad y por tanto con sinceridad». El vicepresidente Tercero, Manuel Chaves, por su parte, zanjó que este tipo de debates son «inútiles» y «no sirven absolutamente para nada».
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