De Guindos y Garicano han mantenido ya varios contactos

Diferentes dirigentes de Ciudadanos aseguraron a este diario que Rajoy «ha entendido» su posición , y apuntan a que, como confirmó Rivera en rueda de prensa, ni siquiera le pidió que cambiase el voto. «Ya sabe que no le vamos a apoyar», aseguró el presidente de Ciudadanos tras una reunión en la que acordaron abrir «un canal de comunicación permanente» entre ambos y el compromiso de Rajoy de trasladar información económica para que los responsables económicos de ambos partidos vayan acercando posiciones en lo relativo al techo de gasto y la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado para el año próximo.

La ausencia de un Gobierno en plenas funciones justifica que estas negociaciones de carácter económico no vayan a celebrarse con luz y taquígrafos, pero los equipos avanzarán en el trabajo. «No va a haber una mesa de negociación porque aún no hay Gobierno pero cuando lo haya, sabremos por dónde van las cuentas », explicó Rivera. Ayer se hizo público este espacio de entendimiento , pero lo cierto es que los primeros contactos ya se han venido manteniendo en las últimas semanas entre Luis de Guindos y Luis Garicano, según pudo saber este diario.

No obstante, tras la declaración de Rajoy, cundió la sensación en los pasillos del Congreso de los Diputados de que se avanzaba hacia un «sí» de Ciudadanos en la investidura. Diferentes dirigentes de la dirección del grupo parlamentario aseguraron que «no nos movemos de la abstención». Un miembro de la Ejecutiva apuntaba ayer: «Nosotros no vamos al sí, pero estamos convencidos de que el PSOE se abstendrá». El mismo dirigente recordaba que para pasar del «no» a la abstención hubo que superar «resistencias» y que no hay ninguna voz en el partido que pida cambiar a un «sí».

De hecho, apuntan a que los contactos serán exclusivamente para la cuestión presupuestaria . Y que la mejor prueba de ello es que se rechaza de plano abrir una negociación programática que Ciudadanos solo acepta si en ella participa el PSOE y para trazar unas líneas estratégicas que sirvan para que los socialistas se abstengan. «¿Qué sentido tiene que no esté presente quien es decisivo?», reflexionaba un dirigente de Ciudadanos.

En el entorno del presidente de Ciudadanos sí reconocían que la comparecencia de Mariano Rajoy daba «demasiado pie al optimismo» y señalan que Rivera le dejó claro en la reunión que no insista en pedir su voto afirmativo porque eso puede generar la reacción opuesta. De hecho fuentes de la dirección apuntan a que existe consenso para dirigir el foco de toda responsabilidad hacia el PSOE.

Para reafirmarse en sus posturas ayer se animaba a leer entre líneas la comparecencia de Rajoy, que señaló que «sin un compromiso del PSOE no habrá Gobierno», descargando a Ciudadanos de esa responsabilidad y situando al partido de Rivera en otro ámbito, cuando se refirió a que «sin Ciudadanos no habrá estabilidad» . Y entienden en la formación que ese compromismo quedó patente ayer: «Lo que se ha anunciado es que si logra ser investido será un gobierno que tendrá mayoría en asuntos fundamentales».

Destacan que su posición garantizaría cierta estabilidad económica en los aspectos acuciantes, además de la cuestión territorial. El líder de Ciudadanos planteó ayer al líder popular firmar un «pacto por España» para solemnizar el consenso de los tres partidos constitucionalista respecto a la cuestión territorial para que los ciudadanos tengan claro que, gobierne quien gobierne, la unidad territorial «no se negocia» .

Rivera aseguró que a Rajoy le había parecido bien la idea, que el líder de Ciudadanos planteó por primera vez en octubre del año pasado durante su participación en un Foro ABC. Su intención es planteárselo también a Pedro Sánchez, ya que el reto secesionista «amenaza la Constitución, la convivencia y 40 años de paz y libertad».

Rivera se mostró seguro de que el candidato aceptará finalmente acudir a la investidura y que la presidenta del Congreso fijará una fecha. El líder de Ciudadanos pidió a Rajoy que lo haga «cuanto antes». Es más, posteriormente, un dirigente del partido se mostraba muy optimista al respecto: «Lo va a hacer seguro» , señala. Y esta misma fuente aseguraba que lo que se le ha trasladado al PP es que «mientras no vaya a la investidura el PSOE está cómodo» y que «no tiene alicientes para no moverse».

Rivera exhibió ayer un tono muy suave con Mariano Rajoy. Los tiempos del veto se han terminado, y si el líder popular asume una estrategia que sea tendente a presionar al PSOE y no a insistir en el sí de Ciudadanos así continuará. «Hoy la propuesta del Rey es Mariano Rajoy», y en este momento «nosotros hemos asumido que no hay alternativa. Lo que hay que intentar es que salga la investidura».

En este escenario, Rivera descargó toda la responsabilidad del bloqueo en Pedro Sánchez y le pidió que «al menos acceda a negociar», para lo que ofreció su ayuda: «Yo no soy mediador, pero a pesar de eso si el PP y el PSOE creen que Ciudadanos puede ser necesario, estamos a disposición », señaló. «Si necesitan algún tipo de colaboración, que nos llamen. Ya hemos pactado con ellos, tenemos experiencia y cintura».

De no acceder a esta fórmula, advirtió al PSOE: «Si sigue en el no, no, no; inflexible e inmovilista, España está condenada al bloqueo y a una crisis institucional sin precedentes», e hizo suyas las palabras de Felipe González: «Si tú no puedes gobernar, ir a la investidura o tener mayoría, hay que permitir que alguien gobierne y el país se ponga en marcha».