Vox romperá todos los Gobiernos autonómicos con el PP y no descarta hacerlo en los ayuntamientos

Faltan apenas unas horas para que la formación de Santiago Abascal consume -de manera oficial- su amenaza de divorcio con los populares por el asunto del reparto de menores extranjeros no acompañados hacinados en el archipiélago canario entre el resto de comunidades autónomas al que los territorios del PP han dado luz verde. Y a pesar de que Abascal haya aplazado a primera hora de este jueves el anuncio de decisión a después de la reunión con su cúpula, que tendrá lugar este jueves por la tarde a las 18.30 horas, el partido asegura que es «clara» y que afectará a los Gobiernos de la Comunidad Valenciana, Región de Murcia, Aragón, Extremadura y Castilla y León. Porque «la salida de un Gobierno es con todos y con todo lo que eso implican», avisan, dejando claro que sólo hablarán con los populares en ocasiones puntuales como es el caso de los presupuestos en caso de producirse la ruptura y sin entrar a valorar la posibilidad de un adelanto electoral en alguno de estos cinco territorios.

Desde Vox no van a actuar con «falta de elegancia» ni con «deslealtad» hacia los populares e insisten en que la cuestión migratoria y el reparto de menas está incluido en sus pactos de gobernabilidad firmados con el PP, y que ha sido su presidente, Alberto Núñez Feijóo, el que los ha roto de manera «unilateral«, señalaba Abascal en declaraciones a los medios de comunicación el Congreso. Unos acuerdos que cumplirán hasta el final con todas las consecuencias que ello pueda acarrear, incluida la pérdida de rédito económico o tener que poner en la calle a más de un centenar de personas. Ya que, de no hacerlo, el líder de Vox faltaría a su palabra y en ese caso, no podría continuar en el cargo, deslizan otras voces cercanas a la directiva.

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No entienden en Vox, por otro lado, que Génova se tome a risa la posibilidad de que ejecuten la ruptura el las autonomías que cogobiernan juntos desde las elecciones locales y autómicas de mayo del año pasado y aseguran que con quien tienen que hablar -y ya están haciéndolo- es con los barones populares y no con su cúpula nacional en referencia a las declaraciones al portavoz parlamentario del PP, Miguel Tellado, que ha dicho que Vox no se ha puesto en contacto con ellos en ningún momento.

Feijóo, que según Vox fue llamando uno a uno esta semana a sus consejeros para «ordenarles» votar a favor del reparto de 400 menas en la Conferencia Sectorial de Infancia y Adolescencia del miércoles por la tarde en Tenerife, «no soporta que le digan que gobierna con la ultraderecha». Pero lo que realmente hace el presidente popular, dicen, es equipararse «en todo» y «cada vez más» a Pedro Sánchez: «La gente no entiende eso, sólo las posiciones claras. Y lo que hace Feijóo, esa supuesta política para adultos como él la llama, es incomprensible». Y ahora, ya sea «por complejos o por estrategia» parece que les conviene gobernar solos en estos cinco territorios.

Vox, que asegura estar siendo el protagonista de una auténtica caza de brujas -«estamos viviendo un momento en el que todo es contra nosotros«, afirman-, se crece ante la adversidad y entre sus filas, predomina el pensamiento de esta situación puede acarrearles incluso un incremento de votos de cara a unas próximas elecciones al igual que ya ocurrió, dicen, cuando presentaron su moción de censura -fallida- contra Sánchez en 2020. «Los argumentos que usan contra nosotros no tienen límite. Pero nos da igual. Esto hay que pararlo y hay que pararlo en seco», sentencia la formación en referencia al reparto de menores inmigrantes.