El fiscal pide 18 años para los padres de Asunta por asesinato con alevosía

Los acusados se pusieron de acuerdo para suministrar a su hija de forma continuada un medicamento que contiene Loracepam, un ansiolítico «sedante, relajante y amnesiante». Esta sustancia «no le estaba indicada a la niña por ninguna dolencia», recalca el fiscal, quien recuerda que sí que la tenía prescrita la madre para sí misma y añade que se la suministraron repetidamente durante el verano de 2013.

El 21 de septiembre los padres y su hija comieron juntos. «Puestos de común acuerdo, y con la intención de acabar con la vida de la niña, le suministraron una cantidad del medicamento indicado necesariamente tóxica para posteriormente, cuando hiciera efecto, asfixiarla», detalla el fiscal en el punto doce de su escrito de acusación .

Más tarde, la madre la trasladó en su coche a la finca familiar de Montouto. En un momento comprendido entre que fue llevada a Montouto y las 20 horas «la asfixiaron por medio de la compresión que le aplicaron sobre la boca y la nariz. Durante el proceso de sofocación la niña sufrió náuseas o vómitos».

Asunta «no pudo defenderse de modo efectivo porque estaba bajo el efecto del medicamento» que con ese fin le habían suministrado. En un momento próximo a la muerte, continúa la Fiscalía, «la ataron por los brazos y los tobillos por medios de unas cuerdas plásticas de color naranja» y la trasladaron a la cuneta de una pista forestal de Feros (Teo), que dista de la casa unos cuatro kilómetros. Allí la encontraron a la una y cuarto de la mañana.

El fiscal solicita la declaración de 46 testigos durante el juicio, 12 peritos, así como la lectura y exhibición de numerosas pruebas documentales.