Santamaría advierte de que el espionaje podría afectar a la confianza entre países

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría , ha remitido a la explicación que dará el director del CNI, Félix Sanz Roldán, en la Comisión de Secretos Oficiales del Congreso . Será el próximo miércoles, a las 9 de la mañana, y a puerta cerrada. Como su propio nombre indica, será una sesión secreta y restringida a los portavoces que tienen una autorización expresa y cualificada de la Cámara para estar presentes. Lo que ocurre es que siempre suele haber filtraciones, aunque parciales e interesadas.

En todo caso, esa es la línea que mantiene el Gobierno: remitir al CNI. Mientras tanto, Santamaría ha explicado que el Ejecutivo está recabando información. La reclamó al embajador de Estados Unidos el lunes, y está pendiente ahora de recibirla. Así que la vicepresidenta insiste en que hay que ser prudentes. Ahora bien, con una advertencia seria: «De confirmarse las informaciones de espionaje en españa, afectará a la confianza y las relaciones mutuas (con Estados Unidos)».

Más allá del espionaje, la vicepresidenta se ha referido también en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros a los contactos que está manteniendo el Gobierno con CiU , y sobre todo con su portavoz parlamentario, Josep Antoni Duran Lleida. Santamaría ha reconocido que el Ejecutivo está buscando un acuerdo con la Generalitat, aunque no ha querido precisar su contenido.

Sí ha dejado claro que los parámetros en los que se mueve el Gobierno de Rajoy son muy claros: respeto a la Constitución y cumplimiento de las leyes . En el posible acuerdo, por lo tanto, no entraría la convocatoria de una consulta sobre el futuro de Cataluña, en ninguna de las fórmulas que maneja la Generalitat, y que según el Gobierno no respetan el ordenamiento constitucional.

Fuentes del Gobierno han comentado que los contactos se encuentran en una fase de aproximación, de tranquilizar el ambiente y las relaciones. En el horizonte está la reforma de la financiación autonómica , aunque el Ejecutivo se resiste a confirmar que es un asunto central en el acuerdo que maneja con los nacionalistas catalanes.