Salgado echa balones fuera y culpa a Merkel de alentar el ataque especulativo

Y en este entorno el Gobierno insistía ayer en qué poco más puede hacer el Ejecutivo español. La vicepresidenta económica, Elena Salgado, apuntaba en Gerona que el recrudecimiento de las tensiones se debe a la especulación y a la propuesta de incluir a los agentes privados en futuros rescates . Aunque la ministra no mencionó expresamente a Alemania, fue esta la que puso la medida encima de la mesa, con lo que el reproche de la vicepresidenta no podía sino dirigirse a ella.

Unas horas antes, Salgado había defendido en Madrid, en el Senado, que las tensiones que están viviendo los mercados y que están afectando a España no se deben a una supuesta falta de solvencia del Reino de España, sino que van más allá y son un ataque al euro.

En un sentido similar, el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, defendió en el Congreso que los mercados no están actuando conforme a los fundamentales de la economía. «No tiene sentido que la prima de riesgo de la deuda española esté en niveles similares a los de Ucrania, Líbano, Colombia o Argentina», apuntó (ver gráfico a la derecha). Al igual que Salgado, aseguró que involucrar al sector privado en el mecanismo de solución de las crisis «genera turbulencias». A su juicio, no se debería comprometer al sector privado salvo en casos muy excepcionales y después de aplicar todas las posibles soluciones.

Y mientras en Bruselas, el comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia, replegaba velas tras el revuelo organizado por sus palabras de la semana pasada en las que ponía en duda la acción el Gobierno español para salir de la crisis. Aseguró que «el Gobierno está haciendo lo que debe ya que está realizando un proceso de consolidación fiscal, cambios en el del sector de cajas de ahorros, la reforma laboral y de pensiones para contribuir al desendeudamiento del país a medio y largo plazo».

Por su parte el departamento del Comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn, advirtió que «las iniciativas necesarias para tranquilizar a los inversores y a los mercados se han tomado o se están tomando. Lo que no se puede esperar es que los mercados cambien radicalmente su percepción y que la confianza regrese en cuestión de horas. Ésta volverá cuando los mercados tengan claro que se han tomado las decisiones pero también que se aplican».

Desde la presidencia del BCE, Jean-Claude Trichet, lanzó ayer un mensaje de tranquilidad al asegurar que la Eurozona no está en peligro y que, incluso Grecia e Irlanda son viables. Al mismo tiempo aprovechó su visita a la Eurocámara, y dados los nuevos poderes que le otorga a ésta el Tratado de Lisboa, para pedir que en el trámite parlamentario endurezca las propuestas de la Comisión sobre nueva gobernanza económica ya que, según él, las sanciones para los países que no cumplan el Pacto de Estabilidad tienen que ser automáticas para garantizar la estabilidad del conjunto de la Eurozona.

En relación a España Trichet volvió a insistir ayer en la importancia de hacer reformas estructurales ya que son fundamentales para elevar el crecimiento potencial, al tiempo que negó cualquier duda sobre la solvencia de los bancos españoles que puso en duda un eurodiputado austríaco.Mientras tanto, y declaraciones al margen, la oficina estadística europea, Eurostat, dio esta mañana de nuevo una mala noticia sobre la marcha real de la economía ya que 80.000 europeos perdieron su empleo en octubre con lo que la tasa de paro se eleva al 10,1% de la población activa, equivalente a 15,9 millones de personas. Un mes más España, con el 20,7% de tasa de paro, es el campeón absoluto de paro de toda la Unión Europea.