«El Gobierno es partidario de que los españoles se jubilen a los 67 años»

En el Foro Ambrosetti ha sido de nuevo palpable la desconfianza de expertos y empresarios hacia la impenitente recesión española, la deuda, el déficit fiscal y su sector bancario. En un aparte, la ministra se concentra en canalizar un mensaje de confianza, «el spread español está más de 20 puntos por debajo del de Italia», y contesta poco a lo que se le pregunta, pero aquí estan sus respuestas:

«El ministro Corbacho va a estar muy implicado en la elaboración, diseño y presentación, dentro de dos semanas, de la Ley de Procedimiento laboral. También en la reforma del sistema de pensiones, para la que esperamos contar con el informe del Pacto de Toledo».

—¿No ha sido destituido?

—La vicepresidenta primera lo ha dicho claramente: el ministro de Trabajo continuará en su puesto hasta que se incorpore a las elecciones catalanas.

—¿Hay sustituto para Trabajo?

—Supongo que el presidente es el que lo tiene pensado.

—¿Los españoles se jubilarán a los 67 años?

—Ésa es la propuesta de nuestro Gobierno.

—España sigue contrayéndose, ¿cuál es el diagnóstico de su ministerio?

—Que hay confianza en las medidas adoptadas, porque están dando los resultados previstos. Y porque esperamos que sigan dándolos.

—La confianza no parece plena, en este foro se ha pintado un incierto panorama económico para España.

—Los datos están confirmando las previsiones, como lo demuestra la reducción del déficit a la mitad; y es algo que están reconociendo las instituciones internacionales y los mercados. El propio el FMI señala que España posee el mismo margen fiscal que el Reino Unido o los EE.UU., y que en modo alguno está al nivel de Grecia, Portugal o Irlanda».

—Está en duda el que sólo la austeridad, en la que el Gobierno ha tenido que seguir a Alemania, sea suficiente para la confianza .

—Lo primero ha sido reacondicionar el presupuesto, para una reducción del deficit, el pago de los intereses de la deuda, todo ello devuelve la confianza a los mercados.

—También ahoga el necesario crecimiento para crear empleo.

—Si se amortiza la deuda también hay más dinero para invertir en la economía productiva. Y, además de recortar, también hemos procedido a una reforma del sector de bienes y servicios, y del sector bancario, donde se ha reducido el número de cajas de 45 a 18. Son grandes cambios que cooperan a la reactivación.

—¿Cómo evoluciona el temido diferencial de la deuda?

—Es algo que también lo confirma la reducción en el «spread» (de los bonos del estado). Según la semana, es entre 20 y 30 puntos mayor que el de Italia y entre 160 y 170 mayor que el portugués y el irlandés respectivamente. Prefiero no hablar del griego.

—¿No se siente escuchada?

—Lo hemos dicho y lo repito: nuestra economía no es comparable, es más fuerte y diversificada. Naturalmente que ha pesado mucho la burbuja inmobiliaria, y que la sufrimos, pero la solidez de nuestros bancos y empresas, también las medidas del Gobierno, están propiciando una paulatina salida de la crisis.

— Pero pese a los test en los institutos financieros, la banca española sigue siendo evitada en los mercados.

—Me parece un análisis particular. Los test se han realizado bajo hipótesis muy duras para España y se ha podido hacer frente a supuestos inferiores a 1% de probabilidad. Nuestro sistema ha podido contar al necesitarlo con 17.000 millones primero, más otros 16.000 millones después del FROB y del Fondo de Garantías de Depósitos.

—La banca española sigue dependiendo del hilo vital de liquidez del Banco Central Europeo.

—Se están empleando las facilidades de (las subastas) del BCE porque ahí están para ello. Ya iremos viendo cómo es posible utilizarlas cada vez menos.