Cómo devolver los regalos de Reyes: del derecho de desistimiento a la reclamación

En el primer caso, hay que recordar que por ley todos los productos que se adquieran en tienda física u online tienen una garantía de 3 años (1 año si es de segunda mano). Un periodo en el que el vendedor es responsable de las faltas que puedan existir «y que no sean debidas a un mal uso de la persona consumidora». En este tiempo, recuerdan desde CECU, que el consumidor puede elegir entre la reparación o la sustitución del producto a excepción de que resulte imposible y el empresario incurra en costes desorbitados.

Si lo que queremos es cambiar un producto que no está defectuoso, pero con el que los Reyes no han acertado, no es lo mismo si sus majestades lo han adquirido en una tienda online o en un establecimiento físico. En el primer caso existe el derecho legal de desistimiento que permite la devolución en los 14 días siguientes a su recepción. No hace falta alegar ningún motivo, aunque dependiendo de las condiciones del comercio puede ser necesario abordar los gastos de envío. «No cabe imponer por parte del comerciante el canje por vales descuento o similares, si queremos la devolución del dinero se tiene que hacer», advierten desde la Federación de Consumidores y Usuarios.

Si la compra se ha realizado en un establecimiento físico, no hay derecho de desistimiento y habrá que atenerse a la política de devoluciones del comercio. Es decir, si establece el canje de vales en lugar de las devoluciones solo habrá esta opción.

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Por su parte, desde la OCU, recuerdan también que las tiendas físicas no están obligadas a admitir una devolución a menos que haya un defecto o una tara. Sin embargo, a pesar de que el comercio lo admita, el reembolso puede no ser en efectivo sino a través de una tarjeta o vale canjeable.

Desde esta organización , también aconsejan conservar «siempre» el tique o la factura simplificada de la compra para poder presentar una reclamación posteriormente. En este sentido, recuerdan q todos los establecimientos están obligados a contar con hojas de reclamaciones a disposición de sus clientes.