El Banco de España pide que se sancione a las autonomías con déficit excesivo

«La intensidad del ajuste y el cumplimiento de los objetivos de los objetivos fueron desiguales entre las distintas administraciones. El mayor avance tuvo lugar en la administración central; por el contrario, el déficit de las comunidades autónomas se incrementó ligeramente, frente a la reducción prevista, y se produjeron pequeñas desviaciones», denunció Fernández Ordóñez en su discurso de presentación del estudio ante el consejo de gobierno del regulador.

En este sentido, el informe del Banco de España asegura que las autonomías han incurrido, entre 1984 y 2007, en una desviación del gasto «sistemática» , superando en ese periodo el 3% anual previsto en los presupuestos.

Por eso, el ente pide que, para cumplir con el objetivo fijado por el Gobierno de reducir el saldo negativo de las administraciones públicas hasta el 3% del PIB, se cumplan a rajatabla las directrices aprobadas en 2010 por el Consejo de Política Fiscal y Financiero , que sirven de guía al Ministerio de Economía para autorizar o no un mayor endeudamiento a una autonomía en concreto en el periodo 2010-2013. El regulador recuerda que esta norma «resulta crucial de cara a mantener un comportamiento fiscal disciplinado» y que «el endeudamiento de las comunidades autónomas deberá ajustarse a la senda de reducción del déficit».

Aun así, Fernández Ordóñez no descarta que el Ejecutivo pueda aplicar otro tipo de medidas para alcanzar ese objetivo de sanear las cuentas públicas. Así, el Banco de España reitera que «debería extenderse a las administraciones territoriales, en particular a las autonomías», el techo de gasto que, asegura el organismo, ha sido efectivo en la reducción del déficit en el Estado central. Es una opción en la que el regulador viene insistiendo desde hace tiempo.

El gobernador ha recordado en su intervención que «el cumplimiento estricto de los planes anunciados es inexcusable» y el informe del Banco de España propone en este sentido que las autoridades puedan aplicar sanciones automáticas a aquellas autonomías que no se ajusten al gasto autorizado. «Es una posibilidad que podría plantearse de cara al futuro», señala el estudio.

La principal razón que esgrime el Banco de España para defender un férreo control del gasto público es que «existen riesgos de desviación al alza» en los objetivos establecidos por el gabinete dirigido por la vicepresidenta Elena Salgado y que se avecina un «agravamiento» de las tensiones de los mercados. De hecho, el diferencial entre el bono español a diez años y el referente alemán ha repuntado en el último mes hasta el entorno de los 250 puntos básicos, empujado por las dudas concretas sobre el futuro de Grecia y las generales sobre la solvencia de la periferia europea.

El regulador reconoce que sigue siendo un foco de tensión y de amenaza para la recuperación económica, junto a otros factores. Entre ellos, el apalancamiento de empresas y familias: «Uno de los ajustes pendientes tras la crisis está ligado al excesivo endeudamiento del sector privado», dice el texto.

En cuanto al endeudamiento del sector público, el documento elaborado por el Banco de España reconoce que el programa de consolidación fiscal impuesto por el Ejecutivo socialista ha contribuido a que, «tras el marcado deterioro de las cuentas públicas de 2009», el endeudamiento de las administraciones públicas se haya desacelerado. «Aunque sigue creciendo a ritmos elevados», avisa. «Esta evolución, unida al escaso dinamismo económico, se ha traducido en un incremento de las ratios de deuda pública y de la carga financiera sobre el PIB», explica el estudio. El organismo asegura, aún así, que la deuda del sector público en España, que en 2010 llegó al 60,1% del PIB, sigue siendo «muy inferior al de otras economías europeas que afrontaban presiones similares».

Las perspectivas del Banco de España para 2011, compartida por otras autoridades mundiales, anuncian una recuperación para los países desarrollados en general, y para España en concreto, «más moderada». Tanto en crecimiento económico como en creación de empleo.