Los tripulantes de cabina de Ryanair no descartan ir a la huelga un día al mes

USO y Sitclpa se reúnen hoy en el Ministerio de Trabajo con representantes de la aerolínea de bajo coste para tratar de acercar posturas y evitar la huelga de los TCP prevista para el 28 de septiembre en España , después del infructuoso encuentro entre las partes en el Servicio de Mediación (SIMA).

La huelga será seguida el mismo día también por los TCP de Portugal, Bélgica, Holanda e Italia, con la posible incorporación más adelante del colectivo de tripulantes de Polonia y Alemania.

Para el delegado de USO Ernesto Iglesias, el debate, centrado en la aplicación de la legislación local para todos los TCP y no de la irlandesa, «seguirá igual de estancado» tras el respaldado recibido hoy por la Junta de accionistas de Ryanair a la cúpula directiva, presidida por Michael O'Leary.

Iglesias ha apuntado, no obstante, que trasladarán al titular de la Dirección General de Trabajo, Ángel Allué, la reciente sentencia de un juzgado de lo Social de Santa Cruz de Tenerife, que ha reconocido como empleado de la compañía a todos los efectos a un piloto contratado a través de sociedades interpuestas, y la advertencia de la Comisión Europea a Ryanair de que debe aplicar las legislaciones de manera inmediata .

Para Iglesias, el fallo del citado tribunal en Tenerife «es una baldosa más en el camino irreversible» para que Ryanair «adopte y aplique» la legislación española y ha añadido que "está en la línea" que demandan los TCP.

No obstante, ha admitido que se trata de una sentencia en primera instancia, por lo que ha dicho que el proceso «se dilatará en el tiempo» por los recursos ya interpuestos por la compañía irlandesa.

Sobre las características de la próxima huelga y la incidencia en los vuelos, el delegado de USO ha entendido que los servicios mínimos decretados por Fomento «serán parecidos» a los de la huelga de finales de julio.

Ha puntualizado que los servicios mínimos de julio, por su elevado porcentaje, «dejaron sin contenido» el derecho a huelga, por lo que la incidencia del próximo paro «será casi una huelga en solidaridad con otros países y se cancelarán muy pocos vuelos».

Los sindicatos se han mostrado nuevamente críticos con la labor tanto de Fomento como de Trabajo, y han solicitado que «dejen de estar de perfil y solo vigilantes» en el conflicto de los TCP de Ryanair y que se muestren «proactivos».