Las pensiones subirán más de un 2% en 2022 y las mínimas un 3%

Los Presupuestos aprobados hoy no incluyen, por tanto, este incremento, ya que habrá que esperar a conocer la evolución de la inflación a noviembre de este ejercicio. La que resulte a final de año también es la que determinará, por su parte, el montante de la "paguilla" que recibirán los jubilados a primeros de 2022 para compensarles por la pérdida del poder adquisitivo, dado que sus rentas subieron un 0,9% a final de año y los precios ya están en el 4%.

Así, a primeros de 2022 los jubilados percibirán la diferencia entre el alza que se les aplicó y la inflación media con la que cierre el ejercicio. En un escenario en el que esa inflación media quedará en torno al 2,5% el pago extra sería el equivalente a 1,6 décimas, lo que implicaría un gasto adicional de unos 2.300 millones, que se consolidaría en las jubilaciones de por vida para próximas subidas. La factura por la desviación de los precios sería, por tanto, de 4.600 millones, sumando el incremento y la consolidación . A esta cantidad habría que aplicarle, a su vez, el incremento de enero, que volverá a ser la inflación media de 2022.

Evolución de las nóminas de pensionistas

En % de variación anual

Variación de

IPC

Nómina de los pensionistas

3,2

Previsión

2,8

2,4

2,0

2,0

2,0

1,9

1,7

1,6

-1,8

-3,2

-1,4

+0,6

0

0,9

-1,0

+0,9

-1,75

+2,3

1,4

0,25

0,25

0,25

1,0

1,0

0,9

+1,4

0,7

0,25

+0,45

+0,45

+0,75

0

-0,2

-0,5

-0,3

-0,2

-0,5

2009

10

11

12

13

14

15

16

17

18

19

20

21

Fuente: Elaboración propia / ABC

Evolución de las nóminas

de los pensionistas

En % de variación anual

Variación de

IPC

Nómina de los pensionistas

Negativo

Positivo

+2,3

2009

-0,3

2,0

1,8

2010

-0,8

1,0

3,2

-3,2

2011

0

2012

2,4

1,0

-1,4

+0,6

2013

1,4

2,0

+0,45

2014

-0,2

0,25

+0,75

0,25

2015

-0,5

+0,45

0,25

2016

-0,2

-1,75

2017

2,0

0,25

1,7

2018

0

2019

+0,9

0,7

1,6

2020

-0,5

+1,4

0,9

Previsión

2021

1,9

-1,0

0,9

Fuente: Elaboración propia / ABC

Lo que sí se desveló ayer es la evolución que tendrán el año próximo las pensiones mínimas y las no contributivas , que crecerán un 3%, el mismo porcentaje de aumento que se aplicará al Íngreso Mínimo Vital, cuya actualización está ligada a la evolución de las pensiones no contributivas. Así lo ha avanzado la ministra María Jesús Montero. Ha destacado que los Presupuestos pretenden que la recuperación económica tras la pandemia sea «justa» y llegue a «toda la población». Por ello, ha destacado este mayor aumento para las pensiones de cuantía más reducida, así como el alza del Iprem del 2,5%, un índice que determina el acceso y la cuantía de ayudas sociales y subsidios.

Las pensiones volverán a ser el año que viene la partida más elevada del Presupuesto con 171.165 millones de euros , un 4,8% más en términos agregados respecto a este ejercicio cuando aumentó un 3%. El gasto seguirá creciendo más cada año teniendo en cuenta el alza en el número de pensionistas por la incorporación de la generación del 'baby boom'. Los ‘baby boomers’ comenzarán a jubilarse en 2023 y tras largas carreras de cotización. Fue la primera generación que accedió a la universidad y copó los puestos de trabajo más cualificados, lo que les dará derecho a pensiones más elevadas en un momento en que la natalidad en España languidece y la precariedad es la tónica del mercado laboral.

Montero ha avanzado también que se trasferirán 4.400 millones de euros adicionales por los llamados "gastos impropios " que asume la Seguridad Social. Es decir, partidas no contributivas que hasta el momento se han pagado con cotizaciones sociales y mermado la caja de las pensiones. Este traspaso de gastos impropios es una de las medidas que recoge el primer bloque de la reforma de pensiones del Gobierno para sanear las cuentas de la Seguridad Social, así como los incentivos para atrasar la edad efectiva de jubilación.