La política monetaria británica continuará su rumbo expansivo como brújula para intentar remontar la crisis. El Banco de Inglaterra ha aumentado en 50.000 millones de libras (unos 60.000 millones de euros) su plan de compra de activos de deuda pública a ... entidades bancarias. El objetivo es insuflar liquidez a la economía y facilitar el acceso al crédito, con un programa que alcanza así los 325.000 millones de libras (388.000 millones de euros)
El organismo presidido por Mervyn King también ha decidido mantener los tipos de interés en su mínimo histórico, al 0,5% , cifra en la que están desde marzo de 2009. Todo sea por espolear el crédito e incentivar la demanda ante una posible recesión. Si bien, según el banco, habrá un moderado crecimiento de las rentas familiares y la inflación del país continuará reduciéndose ( el objetivo oficial es del 2% y el IPC de diciembre fue del 4,2% ), el organismo señala el acceso a la financiación y los ajustes fiscales implementados en el país como posibles obstáculos a la recuperación de la economía británica.
Las miradas también están puestas en las exportaciones. Y es que la crisis de deuda soberana en Europa, principal mercado de Reino Unido, no invita al optimismo. El organismo declaró que «se mantiene la preocupación» por los niveles de deuda en la eurozona.
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