Veinte activistas irrumpen en el despacho del presidente de Catalunya Caixa

Los activistas han esgrimido un cheque gigante con la cantidad de 17.000 millones de euros, exigiéndole al presidente que lo firmara para «retornar el dinero al pueblo de Catalunya», y le han preguntado adónde ha ido a parar ese dinero exigiéndole una respuesta, a lo que ha respondido que no se puede entrar en su despacho violentamente. Al grito de '¿Dónde está el dinero? Lo tienen los banqueros' y 'Esta crisis no la pagaremos', los activistas han permanecido en el despacho entre las 13.30 horas y las 14 y han desplegado una pancarta que rezaba el mismo mensaje: 'Sí que hay dinero, lo tienen los banqueros. Anticapitalistas'.

Durante esta media hora, Manel Rosell ha permanecido la mayor parte del tiempo en su despacho y ha escuchado sus reivindicaciones sin contestarles. Desde el servicio jurídico, Ignasi Fernández ha asegurado a los presentes que sus peticiones habían sido escuchadas y que era imposible que accedieran a su petición de firmar el cheque, aunque desde el grupo le han recriminado que no era suficiente, pero se han negado a discutir con ellos en un despacho aparte. Además, Fernández les ha recordado que estaban incurriendo en un delito si permanecían en un sitio en contra de la voluntad de los propietarios y poco después han llegado efectivos de los Mossos d'Esquadra, que han identificado a los activistas uno a uno. Tres furgones de la Brigada Móvil y un cordón policial han custodiado la puerta mientras que los activistas eran identificados e iban saliendo de la entidad.

Según han explicado después la número uno de la candidatura por Barcelona, Esther Vivas, y el número dos, ¿ scar Simón, que eran quienes le pedían a Manel Rosell que firmara el cheque, la policía catalana les ha dicho que les denunciarán por la vía penal por ocupación. En declaraciones a los periodistas a la salida de la entidad, Vivas ha aseverado que la acción ha sido para denunciar la ayuda que han recibido los bancos y cajas de 17.000 millones de euros mientras que el pueblo sufre los efectos de la crisis. Según ella, han ido a pedirle explicaciones al presidente de CatalunyaCaixa porque su entidad "especula con alimentos y con la vivienda" y a instarle a que devuelva el dinero. "La usura de la banca se antepone a las necesidades de las personas", ha criticado Vivas.

Por su parte, Simón ha justificado su acción: "Están haciendo capitalismo con los pobres y socialismo con los ricos". Además, creen que si los bancos reciben dinero público deberían ser nacionalizados para que se ayude a la gente y reclaman un parque de vivienda social con los pisos vacíos de las entidades bancarias. Manel Rosell accedió a la presidencia de CatalunyaCaixa en febrero, tras la renuncia de Fernando Casado, y hasta entonces era vicepresidente primero de la entidad producto de la fusión de Caixa Catalunya, Tarragona y Manresa (precisamente él era el presidente de ésta última y expresidente de la Cámara de Comercio de Manresa).