La deuda de la banca española con el BCE cae un 4,7%, hasta los 154.798 millones

Desde septiembre de 2013, las peticiones de la banca española al BCE han bajado el 35,8%. Si entonces sumaron 241.089 millones de euros, en lo que llevamos de año, estas solicitudes han caído un 18,01% desde los 188.796 millones de euros de enero.

Las entidades financieras europeas también redujeron sus peticiones de financiación al BCE respecto al mes de agosto, ya que en septiembre pidieron 470.099 millones de euros, el 2,69% menos que los 483.061 millones de agosto.

La apelación de las entidades españolas al BCE se mantiene en torno al 30%, aunque últimamente es algo más elevada, ya que en septiembre rozó el 33% y en agosto se situó en el 33,6% desde el 31,6% que suponían en julio.

Esto significa que las citadas peticiones supusieron de nuevo más del triple del peso que tiene la banca española –teniendo en cuenta sus activos y sus pasivos– en el conjunto de la banca europea, que ronda el 10% , según las estadísticas del balance agregado de las instituciones financieras monetarias de la zona del euro, excluidos los bancos centrales.

Las solicitudes de liquidez de la banca española al BCE alcanzaron un máximo de 388.736 millones de euros en agosto de 2012, y se han ido recortando desde entonces, sobre todo después de que la UE pusiera a disposición de las entidades nacionales una ayuda de hasta 100.000 millones de euros , de la que se utilizaron unos 40.000.

El pasado 5 de junio el BCE bajó los tipos de interés en la zona del euro al 0,15%, – en septiembre volvió a rebajar los tipos al mínimo histórico del 0,05% –, y antes del verano adoptó otras medidas para reactivar la economía, entre ellas la penalización a los depósitos que los bancos efectúan en el organismo.

En concreto, redujo en 10 puntos la facilidad de depósito por la que remunera el dinero, hasta el -0,1%, para animar a los bancos a prestar dinero y reactivar así el crédito, ya que a las entidades financieras ya no les resultaba tan rentable depositar fondos en la caja del BCE.