Cuarta huelga general en dos años de Gobierno de Pedro Passos Coelho

Los transportes serán de nuevo el sector que más trastornos cause a los portugueses ya que el metro no se han establecido servicios mínimos para los trenes (CP), metro de Lisboa, barco (Transtejo y Soflusa). El resto de empresas de transportes asegura un servicio reducido por lo que muchas personas tendrán serias dificultades para llegar a su lugar de trabajo. Aeropuertos de Portugal ya ha avisado de que esta huelga va a afectar al tráfico aéreo por lo que se recomienda la confirmación de los vuelos junto de las compañías aéreas, “su representantes locales o agentes de viaje antes de desplazarse a los aeropuertos”.

Según el secretario general de UGT, Carlos Silva, «no lo hacemos por agrado. Queremos mantener las puertas abiertas a la negociación pero es importante que el Gobierno entienda que una negociación no es una imposición». Este sindicato asegura que en el Ejecutivo ha encontrado “un muro invencible de intransigencia” y para su líder esta huelga va a debilitar aún más al equipo de Gobierno. Para el otro grupo sindical, CGTP, este 27 de junio es “para todos y para todas y también para cambiar de política, de Gobierno y promover elecciones anticipadas”. El líder de la intersindical, Armenio Carlos, espera una gran adhesión, “esta lucha va a ser más importante que las anteriores porque el Gobierno va a quedarse más fragilizado de lo que está. Los sondeos están para demostrarlo”.

Huelgas anteriores

Tanto la CGTP como UGT, que agrupan alrededor de 1,3 millones de personas en un país con 10,5 millones de habitantes, defienden las protestas ante los recortes salariales y el aumento del horario que el Ejecutivo planea imponer a los funcionarios públicos, unos 5500.000 trabajadores de los 5,5 millones que componen la población activa lusa, que además ya se han visto afectados por las medidas de la troika. En noviembre de 2011 los dos grupos sindicales se unieron en una huelga general y además la central CGTP organizó otros dos paros generales contra las medidas de austeridad del Ejecutivo, el 22 de marzo y el 14 de noviembre de 2012.

El pasado día 17 se produjo además una huelga del sector educativo , para el que trabajan unos 200.000 funcionarios. Los profesores protestaron contra los recortes salariales, aumentos de horario de trabajo, movilidad laboral y reducción de personal adoptados en los últimos dos años con el programa de austeridad del rescate financiero luso. Un paro que coincidió con una de las pruebas de selectividad y que perjudicó a más de 20 mil alumnos que no pudieron realizar la prueba nacional de Portugués. Ante las protestas de padres y alumnos la fecha de los exámenes nacionales inicialemnte previstos para hoy (del 6º y 9º curso) han sido alteradas.