El Ecofin vence las trabas alemanas y aprueba convertir al BCE en supervisor único

El comisario de mercado interior, Michel Barnier ha anunciado que Alemania acepta dejar para una próxima reforma de los tratados la garantía de separación entre la autoridad monetaria del BCE y su capacidad de supervisor bancario y que él añadirá antes de fin de año la figura de la autoridad europea de resolución, separada de ambas.

La unión bancaria es clave para poner fin a la segmentación del crédito en Europa, razón por la que España había pedido medidas del Banco Central Europeo para conseguir que el flujo llegue a las empresas. Aunque el presidente del BCE respondió que no descarta una «reflexión» sobre ello, dijo que considera también que muchas de las cosas que pueden hacerse están precisamente en manos de las autoridades nacionales o de los propios bancos. El BCE «no puede hacer mucho más para que los bancos superen sus miedos sobre sus clientes y sus economías» dijo ayer Mario Draghi al término de la reunión del Eurogrupo en la que el ministro español Luis de Guindos había puesto sobre la mesa la necesidad de que se resuelvan los problemas de fragmentación que perjudican a las empresas españolas.

No hay problemas de liquidez

Para Guindos, la principal solución para resolver este problema «es la unión bancaria , y ahí nos jugamos el futuro de la unión monetaria». Draghi había dicho que las cosas «han mejorado mucho en los últimos meses » en cuanto a los diferenciales de deuda, pero rechazó la responsabilidad de los problemas de crédito de las empresas, puesto que la mayoría de los bancos españoles han devuelto las inyecciones de liquidez con dos años de antelación «lo que demuestra que no tienen problemas de liquidez». A su juicio, «hay dos razones por las que los bancos no conceden créditos, una es porque no tengan liquidez, y eso es algo que deben resolver ellos mismos, y otra porque no se fían de la solvencia de las empresas».