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Pedro Sardina Arthous

Madrid

El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, que solo cuenta con 6 diputados (cada día menos) en su afán de protagonismo hizo una pregunta al Gobierno de Sánchez Castejón, que la ministro de Defensa no supo responder quitándose el «marrón» de encima.

Resulta que Esteban le preguntó, mal y a destiempo, al Gobierno, que ¿cómo era posible que se hubieran destinado fondos públicos para comprar un barco nuevo de regatas al Rey? Pregunta muy mal intencionada y solo con el propósito de abortar una operación que estaba haciendo la Armada Española, para dotar a sus escuelas navales de un barco restaurado. La petición de la licitación de la Armada era de un millón ochocientos mil euros, que se gastarían en la compra de un 50 pies de segunda mano y una cubierta, también de segunda mano, para ensamblar todo y construir una nueva unidad de velero escuela.

La ministro, que de barcos no sabe nada, de la Armada menos y de Defensa ni «papa», no supo contestar al malintencionado Esteban y optó por lo más fácil: retirar la licitación de la Armada y si te he visto, no me acuerdo.

La respuesta era muy fácil, Margarita. Te la dejo aquí por si pasa otra vez que hagas un «copy paste» que no me voy a enfadar por tu plagio. Así que aprende un poco: «Señores del PNV, la licitación de la Armada Española para adquirir un barco de regatas no es para uso y disfrute del Rey Felipe VI, es para la Escuela de Vela de la Armada, donde se forjan las dotaciones para en su día salir al mar a defender a España».

Solo eso, Margarita. ¡Ves que fácil! Parece mentira que una ministro de Defensa no tenga recursos para parar al PNV, que aunque le hagan falta sus votos para investir a su santo varón, hubiera sacado de dudas al cateto de Esteban.

Ahora yo le quiero hacer una pregunta al PNV para ver si el señor Esteban es capaz de contestarme. ¿Por qué se le concedieron tres subvenciones de un millón de euros cada una al hijo de un destacado dirigente del PNV para que diera tres vueltas al mundo a vela, y este, aunque partió de la ciudad francesa de Les Sables d'Olonne no llegó ni al través de las islas Canarias? Contesta Esteban, contesta.

Le recuerdo al PNV, que tanto lleva en la poltrona del Gobierno Vasco, que ese dinero también procedía de los impuestos que pagamos todos los españoles, y ustedes no solo no consultaron esa subvención, sino que no le pidieron cuentas al navegante vasco del porqué no había empleado el dinero en la empresa encomendada.

Menos dinero para las guerras, Margarita, y más para dotar a nuestro ejército y fuerzas de seguridad de los instrumentos necesarios para su formación y defensa de España.

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