Las cuentas de Rafa Nadal

Para empezar, todo lo que haga ahora en Shanghái será para sumar. Nadal asomó el lunes con 11.160 por los 11.120 de Djokovic, que no modificará salvo para restar en el caso de que no gane el penúltimo Masters 1.000 de la temporada. Es una excelente oportunidad para el que el balear, que nunca ha ganado en Shangái , le dé un buen zarpazo a su rival.

Luego, a partir del 21 de octubre, el calendario le llevará a Basilea , al terreno de Roger Federer y en donde se estrenará realmente como número uno porque los cuadros de Shanghái se hicieron antes del resultado de Pekín. El torneo suizo da 500 puntos y Nadal los puede sumar íntegros porque sólo ha participado en tres de los cuatro ATP 500 que permite la organización a lo largo de un año.

Después de Basilea, llega París-Bercy, otro de los Masters 1.000 que Nadal no ha conseguido jamás . Djokovic, sin embargo, también puede sacar algo positivo de Francia ya que el año pasado únicamente se llevó diez puntos al perder a las primeras de cambio. Es la última cita antes de la Copa de Maestros.

Ahí, en el O2 de Londres, el ganador puede llegar a acumular hasta 1.500 puntos si lo hace de forma perfecta. Eso implica ganar todos los partidos, lo mismo que hizo Djokovic en la última temporada. De ahí que el actual número uno puede sumar mucho y el dos, nada.

Terminado el año, y durísima la batalla porque Djokovic ya ha dicho que no se piensa rendir, el primer tramo de 2014 es fundamental. Antes de que Nadal tenga que afrontar el maratón, expuesto a una exigencia máxima después de bordarlo esta temporada en casi todos los torneos (lleva diez títulos), tiene el Abierto de Australia . Son 2.000 puntos en juego, importante margen para él y más teniendo en cuenta que Djokovic únicamente puede igualar el título de 2013. Antes se supone que competirá en Doha, un torneo 250.