El gol de Bernardo Silva en el minuto 23 tras un magnífico pase filtrado de uno de los hombres de la primea parte, Kevin de Bruyne, encendió a un Etihad Stadium entregado a la causa. Es más, Guardiola, en auténtico júbilo, comenzó ... a hacer aspavientos para alentar aún más a la hinchada blue.
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) May 17, 2023
Pero no era la primera vez que el exentrenador del Barcelona lo hacía durante el primer tiempo. Porque en los primeros instantes del choque, cuando aún no había comenzado el asedio celeste sobre la meta de Courtois, Guardiola, imitando los arrebatos de Diego Simeone en la banda del Metropolitano, había reclamado a los aficionados del Mánchester City mucho más ánimo.
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Asimismo, consecuencia o no de las peticiones de Pep, el City comenzó a asediar el área del Real Madrid. Courtois hizo dos milagros, a dos cabezazos a bocajarro de Haaland, pero el Manchester City era una apisonadora. Poco después, los dos goles de Bernardo Silva (el segundo fue en el minuto 37, tras un enorme fallo defensivo de la zaga blanca) el Etihad abrazó la absoluta locura.
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