Hazard dejó pinceladas sin ser determinante

En la banda quiso y no pudo. El belga necesitaba confianza y eso significa más partidos, un privilegio que Ancelotti le concedió anoche pero que no podrá darle en muchas ocasiones más, porque no está para ser titular fijo en el Real Madrid. Carece de la punta de velocidad que definió su estrellato, le falta el ritmo de competición que solo dan los encuentros cada tres días y hoy no marca aquella diferencia que le otorgó por méritos propios el mando en el Chelsea. Dejo detalles aislados de su clase, sin ser determinante

El belga jugó inicialmente de extremo derecha porque la izquierda es propiedad de Vinicius y en la banda diestra nunca se fue de su marcador. Lo tenía difícil, porque el Cádiz tapaba los flancos con dos hombres como mínimo. Buscó Hazard hacer paredes con Lucas Vázquez y con Valverde para romper el muro amarillo, pero lo consiguió con Benzema en una combinación que nadie supo culminar ante Ledesma. Dio un pase a Vinicius que el brasileño acabó con un disparo que el guardameta visitante rechazó. También ejecutó el belga un cabezazo que el portero enemigo despejó en la mejor ocasión del Real Madrid.

Fue un partido gris del líder y únicamente Valverde, Militao y Vinicius se ganaron los aplausos del público. Sin Modric, descartado por el Covid aunque ya haya dado negativo , el Real Madrid fue un equipo sin orden. Ya sucedió frente al Sheriff, cuando el croata descansó y los blancos perdieron en el Bernabéu. Ayer, el equipo blanco disputó su fútbol más oscuro, ausente la chispa creativa del Balón de Oro, y se dejó dos puntos inesperados en su casa. Casemiro, además, sumó su quinta amonestación y no estará en San Mamés el miércoles.

Ancelotti exigió a sus hombres poner dos marchas más, porque a fuego lento el gol no llegaba y sus pupilos parecían ofuscados, sin claridad de ideas. Hasta Kroos, el jugador perfecto, perdió tres balones . Se echaba de menos la potencia de Camavinga para conseguir el aumento de ritmo, y nadie comprendió que fuera Valverde, un pulmón nato, el hombre sustituido para dar entrada a Jovic. El conjunto blanco jugaba con dos puntas en busca del gol decisivo, el francés de ariete y el serbio detrás para encontrar el último pase.

El adiós de Valverde dejó sin fuelle al Real Madrid en su regreso defensivo y esos huecos los aprovechó el Cádiz para llegar a la portería de Courtois y desperdiciar la gran ocasión a los pies del exmadridista Negredo, aplaudido en su antigua casa.El Real Madrid pecó de exceso de confianza y lo pagó muy caro.