El árbitro de abc
Ni hay error en el córner que acabó en el gol de Koundé ni el VAR podía entrar en la jugada
Jornada muy tranquila en lo arbitral, en la que el abultado marcador del Metropolitano diluyó cualquier controversia
Piscinazo de Mbappé... y muy buena actuación arbitral en el derbi
Koundé celebra el gol del empate del Barça ante la Real Sociedad
La jornada liguera de este fin de semana ha sido una de las más tranquilas que recuerdo en las últimas temporadas en cuanto a jugadas polémicas. Con todos los focos encima, en el derbi madrileño hubo muchas amarillas y dos jugadas de área ... importantes, un penalti y un gol. Dos acciones en las que el árbitro acertó, lo que unido a que el marcador fue muy claro hacia los locales hizo que se diluyera cualquier controversia.
En el partido estrella del domingo, en el estadio de Montjuic entre el Fútbol Club Barcelona y la Real Sociedad, el conjunto vasco se quejó del córner que dio origen a la remontada azulgrana, que no era según su criterio. Creo que no hubo tal error en dicha jugada, y en cualquier caso no pudo intervenir el VAR al no ser uno de los cuatro supuestos en los que puede avisar al árbitro para que acuda al monitor a pie de campo.
Sucedió en el minuto 42, poco antes de que el encuentro llegara al descanso. Los jugadores de la Real Sociedad se quejan de que hay un error del árbitro en la jugada que culminó con el empate 1-1, obra de Jules Koundé. Hernández Hernández señaló saque de esquina mientras que los visitantes pedían saque de puerta. Para mí acierta el colegiado ya que creo que es el realista Álvaro Odriozola el que despeja de cabeza por la línea de fondo.
No fue la de Barcelona la única jugada polémica del domingo, pues otra acción del choque entre el Elche y el Celta de Vigo fue muy discutida. Sucedió en el minuto 53 en el estadio Martínez Valero, cuando los locales reclamaron un penalti que el árbitro Cuadra Fernández no señaló.
Tras la decisión del colegiado, este fue reclamado por el VAR, que le recomienda ver la repetición de la jugada. Una vez visionada, el árbitro principal corrige lo pitado y sanciona pena máxima por mano de Carlos Domínguez.
Aunque el balón pega en la mano del defensor del Celta estando este de espaldas, lo cierto es que comete la imprudencia de tener los brazos demasiado elevados, por lo que en efecto es penalti.