Dos reyes para una Copa

Y por ahí se entiende este partido, empeñados los dos equipos en imponer sus innegociables estilos. El Barcelona es Guardiola y el Athletic es Bielsa , así sencilla la ecuación. A los azulgrana se les conoce por estos cuatro años de perpetua felicidad en donde cada tarde era un placer, deslumbrante el palmarés con trece títulos en esta era. A los rojiblancos se les descubre a partir de hazañas como la de Manchester, todavía sin trofeos pese a enamorar a todo el mundo. Perdió la final de la Europa League, pero la Copa les da una segunda oportunidad .

Son los dos conjuntos que históricamente mejor se han expresado en esta competición, pues el Barça tiene 25 títulos y el Athletic 23 . Sucede que los primeros viven instalados en el paraíso y si no conquistan una cosa logran la otra, un grande acostumbrado a la gloria. En cambio, el Athletic pasea por la ciudad y observa con nostalgia la gabarra, que no zarpa desde 1984. Ya son 28 años sin títulos .

De ahí que la marea rojiblanca inunde Madrid en la previa. Hay aficionados del Athletic por todos lados y la parroquia lamenta que se esfume un año tan especial, movilizado todo un pueblo porque Bielsa ha recuperado el espíritu. «En ese sentido, parten con ventaja», reconoce Guardiola. «Tienen más hambre» .

En lo meramente deportivo, algo que ha quedado en segundo plano en los prolegómenos porque la política se ha entrometido con el asunto del himno , se esperan pocas sorpresas. Ninguna en el Athletic, que siempre es igual, incapaz de programar un plan B. Repiten los mismos que jugaron la final de Bucarest contra el Atlético de Madrid y se aferra el equipo a la magnitud de Fernando Llorente, un delantero gigante en todos los sentidos .

En el Barcelona, por contra, la novedad está atrás. Empezando por la portería, con Pinto como guardameta confirmado porque este es su torneo y no se negocia . Y luego con la defensa, con Piqué y Mascherano como fijos y a la espera de que se confirme a Montoya en el lateral derecho y a Adriano en el bando opuesto. Por lo demás, la única duda está en los socios de Messi. Alexis y Pedro tienen más números que Cesc o Cuenca.

Es una noche especial, la última con Guardiola y quién sabe si también cierra la etapa de Bielsa en el Athletic. Se miden dos entrenadores que se adoran, dos equipos que hermanados en estos acontecimientos. Sólo hay una Copa para dos reyes .