Carlos Sainz también le da al golf

El piloto de Ferrari, lógicamente, era el favorito de la afición italiana. «Me encantan el golf, Italia y Roma, o sea que es la combinanción perfecta para disfrutar al máximo de la jornada. Aquí en Roma siento muy de cerca el cariño del público», comentó el madrileño con una sonrisa al terminar su actuación. Con un hándicap 9 en su haber, reconoció no haber practicado mucho últimamente. «No he jugado mucho desde el verano y en este mes he estado en Italia, Japón y Singapur sin apenas tocar una bola; pero era una ocasión que no podía dejar pasar. Soy un gran fan de este deporte y de los deportistas españoles que han representado a mi país por todo el mundo, especialmente de personajes como Seve Ballesteros».

Con alguien como Sainz, un astro en lo suyo, es imposible no hacer la comparación entre las carreras y el golf. «En la Fórmula 1 tengo las cosas bajo control porque sé que tengo el talento y la capacidad para hacer lo que quiera con el coche, pero desafortunadamente en el golf no es así. No tengo ese control con el palo y estoy nervioso, no voy a mentir, especialmente con tanta gente mirando… ¡no quiero matar a nadie!», bromeó.

«Para mí es más fácil hacer un adelantamiento que meter la bola en el hoyo. Me he divertido mucho hoy, el campo es increíble, estaba en unas condiciones espectaculares y nos hemos divertido muchísimo frente a Djokovic y Popert», relató. «Este recorrido es una pasada y para un loco por el golf como soy yo, poder jugar un campo así preparado para una Ryder y con un 'rough' que te llega a la cadera es increíble. No es nada fácil de jugar, pero a pesar de ello lo he pasado muy bien».

Y en cuanto a la actualidad de su competición, tiene claro que el triunfo de Singapur fue un hecho aislado y que sus retos para la temporada están muy lejanos a pensar en nuevos triunfos. «Honestamente, este año no se trata tanto de la posición final ni de buscar el campeonato de pilotos porque, en realidad, no hay nada que ganar. Al máximo que puedo aspirar es a ser cuarto en el campeonato. Estoy en Ferrari para desarrollar el coche, para intentar convertirlo en un coche ganador de carreras nuevamente. Es cierto que he tenido una buena racha en algunas carreras, pero es hora de hacer que ese coche funcione para el próximo año y, con suerte, pelear por el título», reconoció.

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Volviendo a la Ryder Cup, todavía le ha quedado algo por hacer en esta semana mágica para él: verse con la otra gran estrella española de esta semana, el vasco Jon Rahm. «Todavía no hemos podido hablar, me gustaría ir a verle dar unas bolas y ponerme al día con él antes de que empiecen la tensión del torneo», concluyó.

La banderas rojigualdas que ondeaban en las gradas también apoyaban a Andrea Revuelta y Paula Tejedo, participantes en la Junior Ryder Cup, que llevan una amplia ventaja sobre las americanas (12-6) de cara a la última ronda de hoy. «Tengo la piel de gallina y es un verdadero honor estar aquí; es el golf en su máximo esplendor y una versión del juego en equipo fantástica», explicó la primera, mientras que para la castellonense «lo alucinante es que nos tratan como estrellas, encima jugando el mismo campo, ante tanto público y con la televisión retransmitiéndolo. Es para estar orgullosa».

Otra mujer destacada es Lara Arias, la jefa de mantenimiento que lleva tres años trabajando para llevar este campo a la excelencia. «Lo más difícil ha sido lidiar con la propia Italia, un país sin cultura de golf, para hacerles entender que este evento era enorme a nivel mundial», reconoció.