Pau Gasol asume el liderazgo de los Bulls

Butler confirmó su condición de jugador clave dentro del equipo y cada día está más cerca de ser el nuevo Scottie Pippen. Lo demostró al ejercer el liderazgo en los momentos decisivos de la recta final del cuarto periodo cuando el partido quedó sentenciado. El escolta titular de los Bulls encabezó el ataque del equipo al aportar 21 puntos, nueve rebotes, tres asistencias, puso dos tapones y recuperó un balón.

Si Butler definió en el juego exterior, Gasol fue el jugador que mantuvo al equipo todo el tiempo en el partido con las acciones bajo los aros al aportar otro doble-doble de 16 puntos y 13 rebotes en los 41 minutos que jugó, el que más de todos sus compañeros.

El español impuso su presencia en la pintura y los 11 rebotes defensivos que capturó se hicieron todavía más importantes ante la ausencia de Noah, que se sintió enfermo antes del partido. El jugador de Sant Boi anotó 7 de 16 tiros de campo y 2 de 4 desde la línea de personal, repartió dos asistencias, puso dos tapones y recuperó un balón.

El ala-pívot Taj Gibson, que ocupó el puesto de titular de Noah en cinco inicial, hizo una buena labor ofensiva al aportar 16 puntos, cuatro rebotes y puso dos tapones. Mientras que el base Aaron Brooks, aunque salió de reserva, fue quien dirigió el juego de los Bulls y con Kirk Hinrich se combinaron para compensar la ausencia de Rose, segundo partido consecutivo que se pierde por el esguince del tobillo izquierdo que sufrió el pasado viernes antes los Cavaliers de Cleveland.

Brooks logró 13 puntos y ocho asistencias, que lo dejaron como el sexto jugador de los Bulls, junto con el alero novato Doug McDermott, que en la primera parte fue importante al anotar los 12 puntos con los que concluyó el partido.

Pero si hubo un jugador que desequilibró el marcador a favor de los Bulls, éste no fue otro que Mirotic, el montenegrino, nacionalizado español , que salió en el cuarto periodo cuando el marcador señalaba un empate a 69-69 y se estrenó con dos tiros de personal, que le dieron confianza.

Tanto que el entrenador de los Bulls, Tom Thibodeau, también se la mantuvo y de nuevo le respondió con dos triples monumentales en un lapso de tiempo de 37 segundos que rompió el marcador a favor del equipo de Chicago (87-79) sin que los Magic ya pudiesen reaccionar porque luego Butler siguió de líder encestador y sentenció.

Mirotic en los 23 minutos que estuvo en el campo aportó ocho puntos (2-5, 2-4, 2-2), todos logrados en el cuarto periodo, capturó seis rebotes, que fueron defensivos, dio cuatro asistencias, recuperó un balón y perdió otro.

La victoria dejó a los Bulls con marca de (3-1) y líderes destacados en la División Central. Por su parte, los Magic (0-4) siguen sin conocer la victoria, primera vez que tienen esta marca desde la temporada de 1990-91 cuando la comenzaron con 0-6, a pesar de los 21 puntos y nueve rebotes que consiguió Tobias Harris, su líder encestador.

El pívot suizo Nikola Vucevic volvió a ser el mejor en las acciones del juego interior y bajo los aros al aportar un doble-doble de 19 puntos y 13 rebotes.

El partido no comenzó bien para los Bulls, que no tenían buen movimiento del balón por parte de Hinrich, que salió en el puesto de Rose, y eso se notó en lo mucho que le costó a su equipo frenar al juego de transición de los Magic y luego penetrar en la pintura.

Las acciones individuales de Gasol que jugó los 12 minutos sin descanso junto con Butler fueron los dos baluartes aunque no pudieron evitar el parcial de cuatro puntos abajo (24-28).

No cambió demasiado la tónica en el segundo cuarto, aunque los Bulls lograron reducir a dos la desventaja (52-54) con que se fueron al descanso y Butler de líder encestador al conseguir 15 puntos, seguido por Gasol y McDermott con 12 tantos cada uno.

Thibodeau entendió con Hinrich de director del juego no podía hacer frente al base novato Elfrid Payton y al escolta francés Evan Fournier que pasaban bien el balón y anotaban, de ahí que diese a Brooks mas protagonismo. Le resultó, al igual que mantener la confianza en Mirotic, que al final sería el factor sorpresa que rompiese el marcador y diese un merecido y trabajado triunfo a los Bulls, que volvieron a sobrevivir sin Rose.