Cospedal: «La Tauromaquia pertenece al pueblo español»

Albacete es tierra muy taurina: posee ganaderías de prestigio, primeras figuras del toreo, una afición entendida y una Feria muy consolidada. La Tauromaquia se respira desde la llegada: en la estación de tren, nos recibe una exposición de carteles de películas de toros. En el Congreso, se han matriculado casi 500 personas y se han vendido ya siete mil localidades para el festival de hoy. En las jornadas van a intervenir unos 30 ponentes, procedentes de 9 países. La oferta cultural se completa con proyecciones cinematográficas y exposiciones.

El ministro Wert ha expresado su deseo de llevar la Tauromaquia, «signo de identidad de nuestra cultura», a la Unesco, para su reconocimiento como patrimonio inmaterial de la humanidad. Y, bromeando, ha recordado cómo le «crucificaron» cuando citó un hermoso verso de Miguel Hernández: «Como el toro me crezco en el castigo».

María Dolores de Cospedal, vestida de «sangre de toro y azabache», ha subrayado la raíz taurina de esta Comunidad: en Castilla-La Mancha, existen 99 ganaderías y 206 Plazas permanentes; la Fiesta ha generado, en un año, 400 millones de euros; nueve de cada diez ciudadanos de esta tierra declaran amar este «arte único, que pertenece al pueblo español. Por ello, debe gozar de reconocimiento y protección».

El Juli ha proclamado que «la cultura supone la libertad de crear, de ofrecer al público lo más íntimo. El toreo es un rito ancestral que nos corre por las venas, transmite a la sociedad valores ejemplares». Y ha concluido con una llamada: «Luchemos por nuestras libertades, todos juntos».

En el precioso marco del Teatro Circo, hemos saludado a maestros como Palomo Linares, Dámaso González y Diego Ventura. Con André Viard, he comentado la estrategias que sigue el Observatorio francés de Culturas Taurinas, del que tanto tenemos que aprender; con William Cárdenas, la necesidad de abordar reformas jurídicas, para defender a los aficionados de los ataques de los antitaurinos. Hoy comienzan las mesas redondas y tendrá lugar el festival. Este Congreso debe ser un primer paso pero queda mucha tarea por delante, para defender con eficacia a la Tauromaquia como Patrimonio Cultural.