La salud de Chavela Vargas empeora

Tras admitir que la situación "hoy es más sombría", ha explicado que el equipo médico que la atiende en el hospital Inovamed de Cuernavaca, capital del central estado de Morelos, está limitado por las instrucciones que Chavela ha dado de no utilizar métodos invasivos. "No quiere nada invasivo, es una chamán (hechicera y sanadora) y los chamanes cuando van a trascender no permiten que nada interfiera. El hecho de que yo le ponga un tubo o un respirador sería un obstáculo", ha dicho.

Y es que Chavela no le teme a la muerte. Ha declarado recientemente en su casa de Tepotzlán (Morelos) que no tenía cuentas pendientes con la vida: "Ni yo a ella, ni ella a mí, no nos debemos nada, estamos muy bien. Voy a detener mis pasos una mañana temprano, o un atardecer, como quiera, no me cuesta", ha asegurado.

La cantante "está despierta, tranquila y todavía toma decisiones y no podemos ir en contra", ha afirmado el médico que desde hace ya diez años cuida la salud de Chavela. "Sigue con buen estado de ánimo y estamos haciendo hasta lo imposible por mantenerla con vida", ha detallado, aunque admite que la misión se dificulta por las limitaciones que ha puesto la intérprete de canciones como 'La llorona' o 'Macorina'. Además, ha manifestado que desde que ingresó en el hospital el domingo pasado, tan solo unos días después de su regreso a México de España, no se ha despegado de ella. "No la voy a dejar ahora que me necesita más que nunca", ha apostillado.

La cantante ha llegado a México el 26 de julio pasado luego de casi un mes en España, adonde viajó para ofrecer un recital con temas del disco que dedicó al poeta Federico García Lorca, titulado 'La luna grande', y para presentar sus memorias. Dicho esfuerzo le ha pasado factura y el 12 de julio fue internada por en un hospital de la capital española, en el que estuvo hasta el 21 de julio. Desde ese día ha estado descansando en la Residencia de Estudiantes de Madrid vigilada muy de cerca por sus enfermeras, amigos y el personal de la institución, hasta su regreso a la localidad mexicana de Tepoztlán, donde ha vivido los últimos años.