Juan Diego Flórez recorre Hispanoamérica en su nuevo disco

Su abuela tocaba tangos en el piano y su padre Rubén es un cantante popular famoso en Perú que predica un gran amor por la gran Chabuca Granda, quien logró su éxito con clásicos como «José Antonio». Sin embargo, las canciones de Cuba y México, especialmente las de José Alfredo Jiménez, así como de otros países latinoamericanos también fascinaron a Flórez desde muy temprana edad. « Esta música va directamente al corazón », confiesa, «porque aborda asuntos que nos afectan a todos directamente como el hogar, la familia, la alegría del amor y el dolor del amor».

Con su nuevo álbum, Flórez quiere transmitir una imagen representativa del continente latinoamericano en 18 etapas utilizando «canciones que son un claro ejemplo de la gente y sus diversos países». Este recorrido musical incluye el «Caballo viejo» venezolano, así como música de Colombia y la canción de protesta argentina «Sólo le pido a Dios». También encontramos «Aquarela do Brasil» de Brasil y, por último, clásicos como «Guantanamera» de «nuestros hermanos cubanos, los reyes del ritmo», como dice Flórez.

Este es, sin duda, el álbum más personal de Flórez hasta el momento. Su repertorio se centra en las óperas bel canto, en particular las óperas de Gioacchino Rossini , y selectas piezas escénicas francesas. Recientemente, demostró su versatilidad con un álbum de Mozart aclamado por la crítica, a pesar de que Flórez no había cantado una pieza de Mozart en el escenario hasta entonces. Con su voz elegante y suave, esa confianza en las notas altas y ese estilo, Juan Diego Flórez ha demostrado durante muchos años su posición excepcional como uno de los mejores tenores de nuestro tiempo.

Incluso antes de comenzar su carrera mundial, trabajó con música pop y rock con la misma intensidad que con la música folclórica peruana. Cantó en el coro de su escuela, escribió sus propias canciones y las interpretó en cafés y piano bares en Lima. A la edad de diez años, aprendió a tocar la guitarra. Hasta el día de hoy, es su fiel compañera de viaje, especialmente cuando comienza a puntear las cuerdas al final de sus recitales como solista.

En este CD también podremos experimentar a Flórez como arreglista. Arregló las canciones «Amanecí entre tus brazos» y «La malagueña», maravillosas secuelas de una temprana y profunda pasión por la música latinoamericana que necesita ser redescubierta una y otra vez. « Esta música es tan intensa como un primer amor », confiesa con franqueza Juan Diego Flórez...