Suscríbete a
ABC Cultural

Las fiebres del amor a escondidas

Estando en mi casa, ella dormía en un cuarto separado del mío, pero yo entraba de madrugada con la sed del pirata y la amaba como si la pasión entre nosotros fuese un incendio que no habría de extinguirse

Es otoño en el corazón

Ha ocurrido un milagro

Jaime Bayly

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Las relaciones eróticas entre mi exesposa y yo mejoraron después de divorciarnos. Durante los años en que estuvimos casados y tuvimos dos hijas, nos consumía una pasión culposa, atormentada: ella quería olvidar a su exnovio francés, médico cirujano, quien le escribía cartas incendiadas del más ... impuro deseo, y yo extrañaba tanto a un amante de mi primera, confundida juventud, que a veces, después de rozar mi cuerpo con el de mi esposa, derramaba unas lágrimas, pensando en él.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia