«Julieta», el último trabajo de Pedro Almodóvar, se estrena hoy en medio de una gran expectación. Y con razón, pues es una buena película donde el director manchego vuelve a sus orígenes y monta lo que él mismo ha definido como «una tragedia llena ... de silencios".
En el lado opuesto, «Las crónicas de Blancanieves», con la pelea entre dos princesas en el origen del cuento y con Charlize Theron y Emily Blunt. Hay ruido, habitual y excesivo, en «Objetivo Londres» y una pequeña joyita, «Madrid, above the moon», un producto inclasificable y que escapa de cualquier norma establecida.
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