La alcaldesa de Cádiz pide a Pérez-Reverte que no dimita

Por ello le pedía que lo liberara de su «compromiso verbal»; le recordaba que hace unos meses ya le había causado «malestar aquella polémica sobre lo que cobraría por dedicar dos años de mi trabajo a la exposición»; y afirmaba que «ahora vuelve a irritarme que otro concejal de un partido local vuelva a utilizar el asunto como argumento político». Pérez-Reverte concluía diciendo que «ni para bien ni para mal me apetece mezclarme en esos fangales ni oír más mi nombre en boca de gentuza de esa calaña, sea del partido que sea; y mucho menos servir de munición y pretexto para maniobras y rifirrafes de partido» y cerraba el escrito mostrando su irritación: «También me conozco un poco y sé que al final acabaré ciscándome públicamente en la puta madre de alguien, y la liaremos. Así que mejor me quito de en medio».

Acto seguido, el concejal de «Cádiz 2012», Juan José Ortiz, lamentó que las «reiteradas críticas que ha vertido el concejal de IU Sebastián Terrada hacia la decisión de que Pérez-Reverte comisariara la muestra del bicentenario hayan provocado su renuncia «porque es el mejor que puede tener la exposición» y señaló que la opinión de uno entre los 27 concejales del Consistorio no representa al «conjunto de la ciudadanía de Cádiz». Por su parte, el aludido Terrada acusó al escritor de haber olvidado «el espíritu del Doce y la democracia» y se justificó afirmando que cumplía «su obligación» al hacer preguntas «lógicas» en el Pleno sobre cómo se va a organizar la exposición y cuánto va a costar.

Ayer, la alcaldesa Teófila Martínez salía a la palestra y le pedía al escritor que «entienda el interés de esta ciudad por contar con un comisario independiente de nivel», como él, quien ya organizó con gran éxito la exposición del 2 de Mayo madrileño, porque «a palabras necias, oídos sordos», según informa Ep. Además, la alcaldesa señaló que a IU y PSOE «parece que les gustaría que en esta ciudad no se hiciera nada» y les advirtió que «coneste equipo de gobierno tienen el tiempo perdido, porque no va a dejarse frenar».