Berdych y la pista, el peligro de los checos

"Jugaremos en una superficie parecida al hielo", explica Álex Corretja, capitán orgulloso después de eliminar en semifinales a Estados Unidos con buena nota. En esa pista es donde mejor se expresan los centroeuropeos, que tienen una Copa Davis en el palmarés (1980) y que perdieron en la final ante España de 2009, en la tierra del Palau Sant Jordi. España acepta la revancha y se prepara para la batalla.

La República Checa es un potencia en el mundo del tenis , ilustre escuela catapultada en los ochenta con el talento infinito de Ivan Lendl. Los dos países se han enfrentado en seis ocasiones, con un balance de 4-2 favorable a España, que fue capaz de vencer a domicilio a los checos en dos ocasiones y la última tiene un significado especial. Fue en 2004, en Brno, y supuso el estreno de Rafa Nadal en la competición , el primer capítulo de una historia muy bonita con esta competición.

El balear, sin embargo, no ha participado en esta edición y pese a todo España ha sido capaz de llegar a la final con una autoridad aplastante. Pero ahora será mucho más difícil. "Será en una pista cubierta, pero lo más rápida que se pueda, con un jugador como Berdych que en esa superficie es muy agresivo con un juego muy plano y con Stepanek, un veterano que juega muy bien hacia delante y que en una pista rápida será incómodo", admite Álex Corretja.

Efectivamente, Berdych es la baza checa, sexto del mundo y decisivo para eliminar a Argentina en Buenos Aires al ganar sus dos puntos (ante Mónaco y Berlocq). Es un especialista en pista rápida y si es cubierta, mejor. Este año ha ganado en Montpellier y viene de hacer semifinales en el US Open. Tiene siete títulos de la ATP y jugó la final de Wimbledon de 2010 ante Rafa Nadal.

Le acompaña en el equipo el veterano Radek Stepanek, 34 años y 40 del mundo. Es un romántico del tenis . maravilloso en la red, y enciende a la grada con sus innumerables gestos. Ha ganado cinco títulos ATP y 15 en el circuito de dobles, un especialista en la materia. El resto del equipo lo forman Lukas Rosol, verdugo de Rafael Nadal en la segunda ronda de Wimbledon, e Ivo Minar.

"Con un rival como España, poder elegir la superficie que queremos va a ser muy importante . Será durísimo, pero estamos muy contentos de poder jugarla", dice Berdych, eufórico por su éxito en Argentina. "Es increíble lo que vivimos, estamos felices. Me siento muy bien de haber jugado los tres días, especialmente en este lugar con toda la gente en contra y con un público muy fervoroso, y sobre todo de haber ganado".

Antes de derrotar a Argentina, el conjunto de Jaroslav Navratil ha superado este año a Italia en Ostrava y a Serbia en Praga.