Alvarno: «Hacer moda es bonito, pero hay que vender»

Alvarno es la firma española que fundaron hace tres años estos dos diseñadores afincados en Madrid y que ya está consolidada como una marca de moda puntera de nuestro país, gracias a la constancia, el buen hacer y sus resultados de ventas. Además es fruto del «know how», que han adquirido trabajando para firmas de moda como Fendi, Alexander McQueen, Oscar de la Renta y Lagerfeld Gallery .

El volumen de trabajo del dúo creativo ha incrementado de manera exponencial. Tienen que diseñar dos colecciones al año para Alvarno, cuatro para Azzaro y compaginarlo con su trabajo de medida, novias y consultorías, que hacen de manera anónima. Hoy viven a caballo entre Madrid y París, disfrutando de la experiencia única de diseñar en el taller original donde creaba el mítico Loris Azzaro, fundador de la marca en el 1967. «Para nosotros es muy importante respetar el ADN de la firma Azzaro, pero adaptándolo al mercado actual», dice Castejón. El mercado es cada vez más joven y quieren rejuvenecer la marca para seguir vendiendo. Lo más refrescante de estos diseñadores es su visión realista del mundo de la moda. Igual que en los demás sectores comerciales, en moda también se trata de generar ingresos para poder subsistir. «Hacer moda es bonito, pero hay que vender. La época de las locuras creativas ya ha pasado», explica Maillard, cuyo lema personal es un dicho de Andy Warhol: «Good business is the Best art» (el buen negocio es el mejor arte).

El resultado lo veremos durante la semana de la alta costura de París, cuando presentarán su pre-colección de verano 2014 en un formato todavía por definir. Prometen «algo de color, transparencias, bordados y mucho punto , porque se adapta bien al cuerpo, sin oprimir, acariciando la silueta femenina», dice Castejón. Se han centrado en el carácter «jet set» de las colecciones de Monsieur Azzaro y sus vestidos de alfombra roja. «Nos gusta la idea de deslumbrar a todas horas , de la tarde a la noche. No queríamos perder ese punto de locura y de inconformismo que tenían sus colecciones», añade. Fue una de las anécdotas preferidas de Maillard que sirvió como punto de partida para la colección. «En su época, a Loris Azzaro le llamaban Mr X, por sus creaciones porno-chic. Le encantaba decir que diseñaba los vestidos para que las mujeres los lleven y que los hombres se los arranquen », asegura Maillard con sonrisa pícara.

La verdad, es que no sabemos si realmente se los arrancarán los hombres a las mujeres, pero sí intuimos que se los arrancarán de las manos las mujeres entre ellas.