Al Bano: «Hablar de Ylenia es como operarme sin anestesia»

Han pasado casi 20 años y todos los medios, en Italia y en el exterior, vuelven a ocuparse de Ylenia Carrisi, desaparecida en la ciudad americana de Nueva Orleans, el 6 de enero de 1994, cuando tenía 23 años. Su padre, Al Bano Carrisi , ha solicitado, por mediación de su abogado, al tribunal de Brindisi la declaración de la «presunta muerte» de su hija. Por orden judicial, en algunos diarios locales se ha publicado ese recurso de Al Bano para que en el plazo de seis meses si alguien tiene informaciones sobre la desaparición de Ylenia, pueda presentarlas ante la Justicia.

Se ha tratado de un paso doloroso, impuesto por la legislación italiana, que Al Bano nos explica así: «Me han impuesto solicitar esta declaración de muerte presunta, porque forma parte de la burocracia del ser humano. Cuando uno nace, alguien lo debe declarar en la oficina correspondiente, al igual que ocurre cuando te casas, te divorcias o con una muerte. Este es un paso que se debía haber dado hace una década, aunque es algo que yo nunca hubiera querido hacer. No oculto que me abre una herida continuamente. No he sido yo el que ha querido dar este paso, sino que el Estado me lo ha impuesto . Había razones técnicas y me han convencido. Es la última cosa que hubiera querido hacer en mi vida».

Para Al Bano queda así cerrada definitivamente la puerta a la esperanza. No es el caso de su exmujer Romina Power, quien no está de acuerdo con esa decisión. Así lo hizo saber el pasado jueves a «Chi l’ha Visto?», un programa de la RAI3 dedicado a la búsqueda de personas. Para Romina, su hija Ylenia estaría aún viva y por eso rogó: «Continuad buscándola». Al Bano respeta que Romina conserve aún viva la llama de la esperanza: «Yo he vivido demasiado en profundidad esta tragedia y no tengo esperanza, pero no se la puedo quitar a ninguno. Si mi exmujer la conserva todavía, me parece bien. Ella es americana. No sé cómo funciona la legislación americana en estos casos. Cada ser humano es un planeta en sí mismo. Respeto su punto de vista. Como decía Voltaire: “No comparto tus ideas, pero daría mi vida por defender tu derecho a expresarlas”».

Una dramática búsqueda

La desaparición de Ylenia marcó definitivamente la relación entre Romina y Al Bano, hasta llevarles al divorcio en 1999, casi 30 años después de su matrimonio, en 1970. Nació entonces una de las parejas más célebres de la canción italiana. En nuestra conversación con Al Bano, era inevitable remontarse a esos días de la desaparición de Ylenia. El cantante nos recuerda así el mes dramático que vivió en Nueva Orleans buscando a su hija: «Con la Policía recorrí los barrios más degradados, en las zonas donde había bandas de delincuentes. Cuando comprendí que no había esperanzas, entonces… decides vivir tú y cerrar la puerta a la esperanza». Al Bano volvió a Italia con la convicción de la dramática suerte que le había tocado a su hija: «Basta una amistad equivocada para arruinarte la vida».

Desde su desaparición, en numerosas ocasiones los medios de comunicación se han hecho eco de rumores o falsas noticias indicando que Ylenia estaba viva. Algunos dicen haberla visto en las playas de Santo Domingo, en México o incluso en el pueblo de la familia, Cellino San Marco.

Con infinita tristeza, Al Bano se refiere a esa «explotación vergonzosa de los sentimientos»: «Hay sujetos escuálidos que se aprovechan con la especulación y el sensacionalismo para crear audiencia, como hizo Lydia Lozano, que trató mi caso como si fuera una telenovela. Eso es algo que no le deseo ni a mi peor enemigo. A Ylenia me la han vuelto a matar en diversas ocasiones. No solo una».

Hoy, a sus 70 años, Al Bano vive dedicado a su bella finca en el sur de Italia, en la que tiene un hotel («vienen muchos españoles», nos dice) y una bodega. Y como cantante sigue contando con el afecto del público italiano e internacional, hasta el punto de que en el próximo festival de San Remo será el invitado de honor. Al Bano dice sentirse «como un joven y proyectado en el futuro». Prepara para este año giras a China, Japón, Rusia, Croacia, Rumania, Francia, Turquía y España.

Su terapia

«La música es una gran terapia que me mantiene joven», nos confiesa, al tiempo que reconoce que Ylenia está siempre en su pensamiento: «Es como si me faltara la mitad de mi vida . La otra mitad debe estar viva para enfrentarte a tus responsabilidades, porque hay otros hijos que merecen una lección de fuerza. Y yo soy una persona que no se rinde nunca y que incluso en la más amarga de las situaciones busco siempre la zona de luz».

Además de Ylenia, primogénita, que hoy tendría 43 años, Al Bano tuvo con Romina otros tres hijos: Yari, Cristel y Romina. Tiene otros dos hijos con Loredana Lecciso. «En el recuerdo de toda la familia está siempre presente Ylenia. El sufrimiento está en cada uno de nosotros. He convivido con esta tragedia, explicando a mis hijos que en la vida hay alegría, pero hay que saber enfrentarse también al dolor».