110 motivos para admirar a españa
La incuestionable españolidad de Canarias
La generación más brillante de poetas y políticos isleños unía el amor por su tierra y por España
ELIGIO HERNáNDEZ
Una característica común de los escritores y políticos republicanos canarios fue que supieron compatibilizar su amor a España y su amor a Canarias , la patria chica y la patria grande, como no podía ser de otra manera por quienes tenían del Estado una ... concepción republicano-federal, sin duda la más brillante de los políticos e intelectuales de la historia contemporánea de Canarias, como don Nicolás Estévanez y don José Franchy y Roca, las figuras más señeras del republicanismo federal canario, junto con don Benito Pérez Galdós, presidente de la Conjunción republicano socialista de principios del siglo XX (1907 a 1913). Ya nuestro prestigioso indigenista Juan Bethencourt Afonso (1847-1913), autor de la magnífica obra «Historia del Pueblo Guanche», nos exhortó a estudiar la historia de Canarias con imparcialidad, «elevando a la par nuestros corazones al terruño guanche y a la madre España, patrias de nuestros antepasados unidas para siempre por un solo destino común».
Benito Pérez Galdós, en su discurso pronunciado el día 9 de diciembre del año 1900 con ocasión del homenaje que le tributó un nutrido grupo de canarios en Madrid con motivo de la publicación de las «Bodas Reales» que completaba la tercera serie de los «Episodios Nacionales», dijo: «Habéis visto que ha llegado la hora de avivar en nuestras almas el amor a la patria chica para encender con él, en llamarada inextinguible, el amor de la grande. Aquí en la intimidad del patriotismo regional me permito asegurar que en nosotros vive y vivirá siempre el alma española. Nosotros los más distantes seamos los más próximos en el corazón de la patria».
Nicolás Estévanez , laureado militar, diputado, gobernador civil de Madrid y ministro de la Guerra en el efímero gobierno de Pi y Margall, en el mencionado homenaje que se le tributó a Galdós en Madrid, dejó constancia de su profunda españolidad y canariedad con estas conocidas frases: «No sé yo de dónde han sacado algunos la peregrina idea de que el amor a la patria chica excluye el culto a la grande; son perfectamente compatibles, como el amor a la madre o el cariño a la abuela».
Del mismo modo, tenemos al poeta Antonio Machado , cuando escribía al poeta canario Saulo Torón: «Sus poemas me traen la emoción atlántica de la conciencia integral de España». Es difícil encontrar una más acertada caracterización del sentimiento español canario.
Juan Negrín , presidente del Gobierno de la II República en guerra, en noviembre de 1938, con ocasión del consejo de ministros celebrado en Pedralbes, afirmó, según refiere Julián Zugazagoitia: «No estoy haciendo la Guerra contra Franco para que nos retoñe en Barcelona un separatismo estúpido y pueblerino. Estoy haciendo la guerra por España y para España, por su grandeza y para su grandeza. No hay mas que una nación: ¡España! No se puede consentir esta sórdida y persistente campaña separatista y tiene que ser cortada de raíz si se quiere que yo siga dirigiendo la política del gobierno, que es una política nacional. Nadie se interesa como yo por las peculiaridades de la tierra nativa. Amo entrañablemente todas las que se refieren a Canarias y no desprecio, sino que exalto, las que poseen otras regiones, pero por encima de todas ellas está España. Quien estorbe esa política nacional debe ser desplazado de su puesto. De otro modo, dejo el mío. Antes de consentir campañas nacionalistas que nos lleven a desmembraciones, que de ningún modo admito, cedería el paso a Franco. En punto a la integridad de España soy irreductible y la defenderé de los desafueros de los de adentro».
En sus memorias, tituladas «Cuando el tiempo nos alcanza», Alfonso Guerra ha escrito: «Daría media vida por proteger el derecho que tienen los nacionalistas a defender sus ideales, pero me reservo la otra media para poder combatirlos democráticamente».
Comparto estas palabras, pero estoy dispuesto a dar solo media vida por los nacionalistas canarios -desde luego no por los independentistas vizcaitarras y catalanes- para que puedan defender sus derechos, aunque naturalmente no renuncio a luchar contra ellos y a derribarlos en noble lid en el terrero de la lucha política, cumpliendo, por supuesto, el mandato sagrado de nuestros aborígenes canarios de levantar al vencido.
La incuestionable españolidad de Canarias
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete