«La luna grande», el homenaje de Chavela Vargas a Federico García Lorca

A Chavela Vargas no le pesan sus 93 años y su delicada salud, y ya tiene preparado un disco-libro en el que musicaliza poemas de Federico García Lorca y que será editado en febrero del próximo año. Con el recuerdo aún vivo del paso por Oviedo de Leonard Cohen, otro lorquiano de pro, Chavela y la actriz Laura García Lorca, sobrina del granadino y directora de la Fundación que lleva su nombre, ofrecieron este domingo detalles del proyecto y una «probadita» del mismo en el marco de la Feria del Libro del Distrito Federal, dedicada este año al exilio español republicano.

«La luna grande» será un disco-libro que no se plantea como un proyecto comercial, sino como un registro histórico, explicó Mary Farquharson, productora de la obra. Durante su presentación en el Zócalo capitalino, la cantante de origen costarricense recitó los primeros versos que conoció de Lorca durante su estancia en España, incluídos en «Doña Rosita la soltera, o el lenguaje de las flores».

En declaraciones a «Milenio», Laura García Lorca destacó la «importantísima» relación del poeta con la música : «Fue su primera vocación, lo que quería era ser compositor. Estudió con el mejor maestro que había en Granada, que murió cuando él tenía 17 años. Quiso irse a París a seguir estudiando música, pero sus padres no quisieron que se fuera tan joven. Al no haber un maestro a la altura del otro, eso se quedó un poco parado y empezó a escribir. Luego su relación con Manuel de Falla fue importantísima , fue una relación muy estrecha: intelectual, artística y personal. La música tiene una presencia muy importante en su obra. Ahí está en el teatro, que está llena de música, pero también en la labor que hizo de recopilación de músicas populares, su interés por tradición y vanguardia, por lo popular y lo culto. Eso está en todo y muy claramente a través de la música».

Chavela Vargas comentó que el poeta y el gran compositor y cantante mexicano José Alfredo Jiménez hubieran sido buenos compañero si se hubieran conocido, pues ambos eran «como dos gallitos de pelea». Según Laura García Lorca, su tío tenía previsto viajar a México en aquel verano de 1936 en que fue asesinado, para asistir a la presentación de «Bodas de sangre».