Hazte premium Hazte premium

Obama reconoce que el uso de la fuerza en Libia no era su primera opción

Unidades de navales de EE.UU. y Gran Bretaña lanzan más de un centenar de misiles crucero contra las defensa aéreas del régimen de Gadafi

afp

PEDRO RODRÍGUEZ

Tras dos semanas de cuestionar las posibilidades de una intervención militar en Libia, la Administración Obama se ha sumado a una tercera guerra dentro de un país musulmán. Para justificar este escenario no deseado, el presidente de Estados Unidos ha recalcado que el uso de la fuerza para proteger a los opositores de Libia no ha sido una decisión ni fácil, ni unilateral ni tampoco injustificada ante las continuadas atrocidades perpetradas por el régimen del coronel Gadafi.

Desde la capital de Brasil, dentro de su prevista gira de cinco días por Iberoamérica, Obama ha reconocido que una limitada acción militar en Libia no era su primera opción: "Este no era el resultado que Estados Unidos o cualquiera de nuestros socios buscaba". Pero según el presidente, "nosotros no podemos permanecer sin hacer nada cuando un tirano dice a su pueblo que no habrá misericordia". Con especial mención al hecho de que las fuerzas de Gadafi claramente no estaban respetando el inmediato alto el fuego exigido por la comunidad internacional.

Según ha confirmado el Pentágono, unidades navales de Gran Bretaña y Estados Unidos desplegadas en el Mediterráneo -tanto barcos de superficie como submarinos- han lanzado múltiples misiles de crucero contra las defensas aéreas de Libia para hacer realidad la zona de no vuelo autorizada la semana pasada por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas a través de la resolución número 1973. En total se han empleado más de un centenar misiles "Tomahawk" dirigidos específicamente contra una veintena de radares y baterías anti-aéreas dotadas de misiles SA-5 a lo largo de las costas de Libia.

Una nutrida flota aliada, liderada por el almirante americano Samuel Locklear desde el buque "USS Mount Whitney", cuenta con 25 unidades ya en posición, junto a numerosos aviones de combate en bases de la OTAN para respaldar esta operación militar denominada "Odisea al Amanecer". Según fuentes militares de Estados Unidades, el Pentágono tiene previsto mantener un papel secundario en este asalto por fases con protagonismo inicial de la aviación militar de Francia.

Esta es la segunda vez que el Pentágono bombardea objetivos en Libia. En 1986, tras un atentado terrorista en una discoteca de Berlín en el que murieron dos militares americanos, el presidente Ronald Reagan autorizó una serie de bombardeos. En esos ataques en Libia perecieron un centenar de personas, incluida una hija adoptada de Gadafi que murió en una de las residencias del dictador en la capital Trípoli.(FIN) 19 de marzo del 2011

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación