Suscribete a
ABC Premium

«¡Qué lástima! tan joven, y ya catalana...»

ÉSA fue la respuesta que recibió de su madre el pintor mexicano Juan Soriano, cuando le presentaba a una amiga («se llama Paloma y es catalana»), hija de exiliados.

La madre estaba casada con un hombre que, cuando agonizaba, se mandó hacer seis trajes nuevos, ... y repetía: «¡Quiero ver otro amanecer!».

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia