La OTAN restablece sus relaciones con Rusia, rotas tras la guerra de Georgia

De Hoop Scheffer precisó que los contactos deben reanudarse "lo antes posible" pero "después" de la Cumbre del 60 aniversario de la Alianza que tendrá lugar los próximos 3 y 4 de abril en Estrasburgo y Kehl.

"No hablarles (a los rusos) no es una opción", aseguró. Asimismo rechazó que la decisión de los aliados de reanudar sus contactos formales con Rusia le dará "capacidad de presión" y subrayó su creencia de que Moscú tampoco lo entiende así.

La mayoría de los países aliados ya se habían pronunciado a favor de esta decisión esta mañana, antes de que comenzara la reunión de ministros de Exteriores de la Alianza, con la excepción de Lituania que consideró era "un poco prematuro" reanudar el Consejo formal con Moscú.

La OTAN interrumpió el diálogo formal con Rusia en respuesta al uso desproporcionado de la fuerza por parte de Moscú en el conflicto del pasado verano en Georgia y por su subsiguiente reconocimiento de las regiones separatistas georgianas de Osetia del Sur y Abjazia. Hasta ahora, desde su suspensión en agosto los aliados se han reunido en el marco del Consejo OTAN-Rusia, a nivel informal de embajadores en dos ocasiones.

El secretario general de la OTAN recalcó que los aliados todavía mantienen no obstante "diferencias fundamentales" con Moscú respecto a su reconocimiento de Osetia del Sur y Abjazia y su intención de construir bases militares en estos territorios, recordando que se trata de "parte del territorio georgiano" para los aliados. "Rusia debería realmente cambiar su posición", subrayó.

De Hoop Scheffer recalcó que los aliados instan a Moscú "a cumplir totalmente sus compromisos" en Georgia y "se retire de las áreas Rusia se ha comprometido a abandonar". También subrayó que las diferencias entre la OTAN y Rusia también persisten en cuanto a "la falta de acceso de los observadores" de la misión de la Organización para la Cooperación y la Seguridad de Europa (OSCE) en Osetia del Sur.

El jefe político de la Alianza también apuntó a la suspensión unilateral de Moscú del Tratado de Fuerzas Convencionales en Europa (FACE, por sus siglas en inglés) como otra de las diferencias fundamentales. A pesar de que De Hoop Scheffer reconoció haber constatado estas diferencias en su reunión bilateral reciente en Munich con el viceprimer ministro ruso, Sergei Ivanov, el secretario general de la Alianza consideró que "no hay alternativa" para no reanudar el diálogo formal con Rusia.

Los ministros de Exteriores mantuvieron también una discusión sobre el propio Consejo OTAN-Rusia, explicó. De Hoop Scheffer reconoció que, en sus cinco años de mandato al frente de la Alianza, este foro no ha funcionado de forma "ideal".

La OTAN, reconoció, espera "trabajar mejor" y reforzar su cooperación con Rusia en Afganistán e impulsar "la ruta norte" para abastecer a las tropas aliadas en Afganistán a través de territorio ruso, la lucha contra el terrorismo y antinarcóticos.

Los ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN también intercambiaron puntos de vista sobre "las propuestas de (el presidente ruso, Dimitri) Medvedev para una nueva arquitectura de seguridad europea", aunque De Hoop Scheffer consideró que los aliados requerirán "más detalles" y "más claridad" sobre el plan. Aunque el secretario general de la Alianza aseguró que los aliados están abiertos a discutir las propuestas del jefe de Estado ruso en el Consejo OTAN-Rusia, recalcó que "el primer foro" para abordarlas es la OSCE.

Preguntado por la defensa antimisiles y la preocupación de algunos países que temen las represalias de Moscú si Washington sigue adelante con el plan de la anterior Administración de su escudo antimisiles, De Hoop Scheffer aseguró que no fue un asunto abordado, a pesar de reconocer que hay "una revisión en marcha en esta área".