Toxo asegura que CC.OO. estará «en la calle» para defender a los trabajadores

Pero Toxo ya vuela solo y su primer discurso ha hecho honor a su fama de duro negociador labrada en sus años al frente de la Federación del Metal. No le gusta la subida del Salario Mínimo Interprofesional —un 3,5% frente al 8% que pedían los sindicatos—, no sólo porque es «pírrica» sino que supone una «ruptura de los compromisos adquiridos por el Gobierno». Y espera poder «corregir» los términos de ese acuerdo antes de su aprobación definitiva, en cuanto la nueva dirección de Comisiones Obreras esté operativa. «No vamos a renunciar a este objetivo», avisó Fernández Toxo.

Esa fue la primera advertencia, pero su intervención fue desgranando una a una las críticas que apuntan a un cambio de rumbo en las relaciones, hasta ahora cordiales, del primer sindicato español con el Gobierno. El nuevo líder de Comisiones reprochó al Ejecutivo de Zapatero reaccionar tarde ante la crisis y «dilapidar el superávit con el que podríamos haber hecho frente a las dificultades» ahora que la recesión está tan cerca.

Ambas apreciaciones sobre la gestión socialista se quedaron en meros tirones de oreja en comparación con la insinuación de tomar las calles si la crisis continúa deteriorando el mercado de trabajo. Toxo afirmó que, bajo su liderazgo, el sindicato «estará mucho más en la empresa y en la calle si esto es necesario para defender el empleo y las condiciones de trabajo». Con él, Comisiones Obreras «estará en primera fila con los trabajadores».