Todo lo que necesitas saber sobre el cambio de Facebook a Meta y el mundo virtual de Zuckerberg

Los cambios de nombre en tecnológicas no son inusuales . Uno de los ejemplos más recientes es el de Google, que en 2015 renombró su matriz como Alphabet. En este caso, el cambio caló de mala manera. Prácticamente nadie habla del buscador haciendo referencia a la firma que lo engloba junto a otras herramientas, como YouTube. Tampoco ha servido para que los reguladores dejen de vigilar de cerca a la compañía. ¿Pasará lo mismo con Facebook y con Meta? ¿Que implica la creación del metaverso para la firma y para el usuario?

Como decíamos, el nombre responde al interés de la compañía, especialmente de Zuckerberg, por ser reconocida como la que hizo posible esa suerte de mundo virtual que promete revolucionar (otra vez más, y estamos cerca de perder la cuenta) la forma en la que nos comunicamos. Meta no quiere ser una empresa de redes sociales. Las redes sociales para Meta están, prácticamente, en el retrovisor. La empresa quiere mirar hacia el futuro . «En este momento, nuestra marca está tan estrechamente vinculada a un producto que no es posible que represente todo lo que estamos haciendo hoy, y mucho menos en el futuro», afirmó Zuckerberg a este respecto durante la presentación de ayer.

Respecto a la elección de la nueva denominación, en concreto, el ejecutivo afirmó lo siguiente: «Solía estudiar Clásicos y la palabra 'meta' proviene de la palabra griega que significa 'más allá'. Para mí, simboliza que siempre hay más para construir, y siempre hay un próximo capítulo de la historia».

El ejecutivo mantiene que su visión, desde que era estudiante en Harvard, siempre fue unir a las personas. Durante Facebook Connect incluso dejó caer que, por entonces, su obsesión era crear algo que permitiese a la gente buscar lo único que no se podía encontrar en la Red: personas. El siguiente paso en ese camino es ofrecer una plataforma que, sobre el papel, haga la vida más fácil al usuario en todos los aspectos. Todo lo mostrado recuerda mucho a lo que vimos en la película futurista de ciencia ficción 'Ready Player One' .

Imagínate un mundo en el que puedes ir a trabajar y comunicarte con tus compañeros utilizando unas gafas de Realidad Virtual. Una plataforma en la que puedes crear un hogar digital propio, a tu gusto. Invitar a amigos para que vayan a ver películas o, simplemente, a charlar. Un sitio en el que puedas estudiar, descubrir ciudades desaparecidas, o aprender a realizar operaciones. También echar partidas de baloncesto o ajedrez recurriendo a hologramas generados mediante gafas de Realidad Aumentada. Que traspasas la pantalla e interactuas de forma física con lo que puebla ese submundo.

Todo esto, evidentemente, sin necesidad de salir de casa . Zuckerberg destacó durante la presentación las posibilidades del metaverso a la hora de combatir el cambio climático. También remarcó las oportunidades de negocio, porque, si, por ejemplo, quieres un jarrón bonito para tu casa digital vas a tener que pasar por caja. Lo mismo pasará con las experiencias interactivas que den sentido y utilidad a ese submundo. Las posibilidades ahí son infinitas, desde visitas turísticas guiadas hasta ropa y complementos para los avatares que el usuario empleará para estar presente de forma física. Un negocio de cientos de miles de millones de dólares, según esperan desde Facebook. O Meta.

Eso parece. La empresa incluso ha anunciado que espera que sus beneficios totales se reduzcan en 10.000 millones de dólares durante 2021 por su trabajo en desarrollo de Realidad Virtual y Realidad Aumentada. También avisa de que quiere ir aumentando la inversión en la tecnología que haga posible el metaverso con el paso del tiempo.

De acuerdo con Zuckerberg, se irá desarrollando poco a poco. El objetivo es que la experiencia esté lista, al menos una parte importante, en los próximos 5 o 10 años. Los expertos, no obstante, tienen dudas sobre las posibilidades de que la tecnología necesaria esté disponible y democratizada en ese plazo de tiempo.

Facebook se convierte en una red social más dentro del conglomerado de herramientas en poder de Zuckerberg; como WhatsApp, Instagram, Messenger y Oculus. Deja de dar nombre a la empresa, por el resto sigue igual que hasta ahora .

Absolutamente en nada. Aunque el empuje del metaverso promete ir relegando, cada vez más, a las redes sociales dentro del negocio de la empresa. Llegado el momento, no será necesario tener una cuenta en Facebook u otra plataforma para poder hacer uso del nuevo mundo virtual.

«A partir de ahora, seremos primero metaverso, no Facebook. Eso significa que con el tiempo no necesitará una cuenta de Facebook para utilizar nuestros otros servicios. A medida que nuestra nueva marca comience a aparecer en nuestros productos, espero que la gente de todo el mundo conozca la marca Meta y el futuro que representamos», ha señalado Zuckerberg a este respecto.

«No», afirma de forma tajante a ABC el abogado especializado en asuntos digitales Samuel Parra. Los responsables de Meta siguen siendo los mismos, y ya se sabe que la empresa está inmersa en nuevas investigaciones gubernamentales a causa de sus últimos escándalos . El cambio de nombre no exime de errores pasados. Tampoco está nada claro que el afán de Zuckerberg por que la firma sea reconocida más por el metaverso que por las redes sociales vaya a cumplirse. ¿Quién llama Alphabet a Google? ¿Quién llamará Meta a Facebook?

No. La propia empresa reconoce que nadie puede ser propietario del metaverso . «El metaverso no será creado por una sola empresa. Será construido por creadores y desarrolladores que crean nuevas experiencias y elementos digitales que son interoperables y desbloquean una economía creativa enormemente más grande que la limitada por las plataformas actuales y sus políticas», ha explicado Zuckerberg.

Otras firmas, como Epic, la desarrolladora de 'Fortnite', o la tecnológica china Tencent también apuestan por la creación del metaverso.

Según ha afirmado el ejecutivo, poner las herramientas para que ese submundo sea posible : «Nuestro papel en este viaje es acelerar el desarrollo de las tecnologías fundamentales, las plataformas sociales y las herramientas creativas para dar vida al metaverso y tejer estas tecnologías a través de nuestras aplicaciones de redes sociales».