Cinco trucos para que tu hijo evite que le 'hackeen' con la vuelta a las clases

Los expertos recomiendan mantener los dispositivos apunto y tener cuidado con los correos electrónicos, entre otras cosas

Los cinco trucos que más utilizan los cibercriminales para robarte la tarjeta de crédito

R. Alonso

Madrid

La vuelta a las clases se acerca, y, con ella, llega el momento de que los más jóvenes vayan preparando sus dispositivos para los meses de estudio que tendrán por delante. Independientemente de que sean estudiantes de colegio o que ya se encuentren en ... la universidad. Y es que las herramientas con conectividad a Internet, como tablets u ordenadores, no han dejado de ganar importancia en el ámbito académico durante los últimos años. Especialmente desde que la pandemia puso la vida de todos patas arriba.

«A día de hoy el uso de dispositivos es muy importante no solo para la elaboración de trabajos, sino también para su entrega. Ahora se permite una interacción prácticamente total con la escuela y con el resto de compañeros y profesores a través de Internet», explica en conversación con ABC Josep Albors, jefe de investigación y concienciación de la empresa de ciberseguridad ESET.

Para evitar sustos durante el curso escolar, es capital que los jóvenes tomen precauciones ante posibles errores que provoquen que sus datos y dispositivos acaben en manos de cibercriminales. Especialmente en el caso de los estudiantes universitarios, un objetivo mucho más explotado por los criminales en la Red desde hace años.

«En estos casos, normalmente los delincuentes buscan claves de acceso a las redes de las universidades para extraer información, cifrarla y extorsionar a las instituciones», dice Albors. El experto de ciberseguridad remarca, no obstante, que eso no implica que el joven víctima de un 'hackeo' no corra riesgos concretos: «Puede ser que el ordenador del estudiante lo utilicen también los padres. Es probable que los criminales encuentren ahí información confidencial -como claves bancarias- o acceso a las empresas en las que trabajan los adultos».

Claves robustas

Contar con contraseñas robustas -que sean inteligibles y contengan números, mayúsculas y símbolos- es capital para proteger el acceso a las plataformas que el usuario emplea. Asimismo, es importante cambiar cada seis meses las claves y no repetirlas en distintos servicios.

«Si tenemos herramientas que tengan doble factor de autenticación, es importante que las activemos», apunta el jefe de investigación de ESET. Gracias a esto, el internauta protegerá sus cuentas con una segunda protección de seguridad además de la contraseña.

Todo actualizado y con antivirus

Es clave que el sistema operativo y todas las soluciones que hay instaladas en el dispositivo que se utiliza para el estudio estén actualizadas a la última versión. Cabe recordar que las nuevas versiones de una 'app', como podría ser la del correo electrónico, suele venir acompañadas de soluciones a brechas de seguridad.

Evidentemente, también es importante tener instalado en el equipo un antivirus que ofrezca una buena defensa del equipo.

Evita los equipos de otros cuando puedas

Intenta evitar en la medida de lo posible abrir sesión en tus cuentas desde dispositivos que no sean los tuyos propios, ya que podrían ser vulnerables a un problema de seguridad. También hay que tener cuidad con lo que se conecta al equipo personal, como podría ser un USB.

Si el correo tiene fallos...

La mayoría de campañas de tipo 'phishing' se desarrollan a través de correo electrónico. En algunos casos son más fáciles de reconocer que en otros; sin embargo, es bastante habitual que tengan bastante errores de ortografía.

Por otra parte, los expertos en ciberseguridad llaman la atención sobre la importancia de desconfiar de todos aquellos mensajes en los que se busque alertar al usuario. Por ejemplo, con un cierre de la cuenta bancaria o con algún problema con la matrícula académica, en caso de que la campaña maliciosa esté más dirigida.

Ten un 'plan B'

En caso de que sufras alguna incidencia de seguridad, lo ideal es contar con una copia de la información más importante, como podrían ser apuntes y trabajos, en otro sitio además de en el equipo.

«Estos archivos tienen que estar bien salvaguardados, ya sea en otro dispositivo físico o en la nube. Si no hay un respaldo, podemos terminar teniendo un problema grave», dice Albors.

 

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