Brasil abre una investigación contra Elon Musk por «manipulación criminal y dolosa»

Durante el fin de semana, Musk utilizó su cuenta X para acusar a Moraes de imponer una «censura agresiva» en Brasil. «Estamos levantando todas las restricciones. Este juez (Moraes) ha impuesto fuertes multas, amenazado con arrestar a nuestros empleados y cortado el acceso a X en Brasil. Como resultado, probablemente perderemos todos los ingresos en Brasil y tendremos que cerrar nuestra oficina allí», escribió el empresario.

Alexandre de Moraes, uno de los jueces más firmes del poder judicial brasileño, ordenó el domingo que Musk fuese incluido en las investigaciones sobre las milicias digitales y por posible obstrucción a la Justicia, organización criminal e incitación al crimen. El juez también estableció una multa diaria de unos 20.000 euros a la empresa X por cada perfil bloqueado judicialmente que haya sido reactivado por la plataforma, lo que hizo a Musk retroceder en sus amenazas.

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Javier Ansorena

«Es inaceptable que cualquiera de los representantes de los proveedores de redes sociales y servicios de mensajería privada, especialmente el antiguo Twitter, ahora X, desconozca la instrumentalización criminal que han llevado a cabo las llamadas milicias digitales, en la difusión, propagación, organización y expansión de innumerables prácticas ilícitas en las redes sociales», dice el documento firmado por Moraes en respuesta a una serie de publicaciones de Musk, en las que amenazó descumplir órdenes judiciales brasileños y reactivar perfiles bloqueados.

«La flagrante obstrucción a la Justicia brasileña, la incitación al crimen, la amenaza pública de desobedecer las órdenes judiciales y la futura falta de cooperación de la plataforma son hechos que faltan el respeto a la soberanía de Brasil», afirmó Moraes, sugiriendo que esas actitudes de Musk refuerzan posibles conexiones de la plataforma X con prácticas ilícitas investigadas por la Policía brasileña. «Las redes sociales no son tierras sin ley», subrayó Moraes en su sentencia.

El juez Moraes también acusó a Musk de iniciar una campaña de desinformación sobre la actuación de la Corte Suprema y del Tribunal Superior Electoral, «reiterada el 7/4/2024, que instiga a la desobediencia y a la obstrucción de Justicia, incluso en relación con organizaciones criminales». Según el juez, hay fuertes indicios de intencionalidad de Musk en la instrumentalización criminal de la plataforma.

La mayoría de las cuentas bloqueadas por la Justicia brasileña son parte de las investigaciones relacionadas con un intento de golpe de estado en Brasil, cuando bolsonaristas invadieron y destruyeron las sedes de los Tres Poderes en Brasilia el pasado 8 de enero de 2023. Se incluyen los perfiles del empresario Luciano Hang y del bloguero Allan dos Santos, investigados por atacar ministros de la Corte, pedir intervención militar y difundir 'fake news'.

El ministro de la Secretaría de Comunicación de Lula, Paulo Pimenta, dijo que Brasil «no es la selva de la impunidad y nuestra soberanía no será socavada por el poder de las plataformas de Internet y el modelo de negocio de las grandes tecnológicas». «No permitiremos que nadie, por mucho dinero o poder que tenga, desafíe a nuestra patria», resaltó.

El fiscal general de Brasil, Jorge Messias, pidió la regulación de las plataformas de redes sociales en el país. «Es urgente regular las redes sociales. No podemos vivir en una sociedad en la que multimillonarios domiciliados en el extranjero tengan el control de las redes sociales y se pongan en situación de violar el Estado de Derecho, incumpliendo órdenes judiciales y amenazando a nuestras autoridades», señaló.

«¡Hemos llegado al límite!», publicó en X el legislador de izquierda Orlando Silva, engrosando el coro de los descontentos con Musk en el Congreso. Por otro lado, los partidarios de Bolsonaro, elogiaron la actitud de Musk. «Espero que se haya iniciado algo histórico: el retorno de la libertad a nuestro país», dijo el diputado bolsonarista Nikolas Ferreira en la misma plataforma.

Este no es el primer enfrentamiento entre Musk y autoridades por el mundo. El multimillonario, que compró la plataforma Twitter en 2022 y es también dueño de Tesla y SpaceX, se proclama como un defensor «absolutista de la libertad de expresión». Sus comentarios del fin de semana se produjeron después que el periodista estadounidense Michael Shellenberger también criticase a Moraes la semana pasada. «Brasil está envuelto en un caso de represión generalizada de la libertad de expresión dirigido por el ministro del STF (Supremo Tribunal Federal) Alexandre de Moraes», publicó Shellenberger.